Hace dos semanas, durante el polarizado debate por la reforma electoral, la intervención del diputado RN René Manuel García sacó una ovación transversal en la sala de la Cámara. "Ya que estamos democratizando más el país, ¿por qué no suprimimos el Senado y hacemos una sola cámara?", fue la frase de García, que aplaudieron desde parlamentarios de la DC, el PPD, el PS y hasta del PC.

Si bien hubo risas, la reacción de la sala reflejaba algo más que la respuesta a un chiste. En los próximos días serán ingresadas a tramitación, al menos, dos propuestas de cambio a la Constitución para suprimir el Senado y transformar el Congreso en una cámara.

Una de las reformas constitucionales está siendo redactada por el DC Gabriel Silber y ya cuenta con las firmas de sus camaradas Ricardo Rincón, Yasna Provoste y René Saffirio, además del PS Juan Luis Castro, el radical Alberto Robles, y los PPD Ramón Farías y Daniel Farcas. "Nuestra sociedad está madura para tener una cámara, los tiempos de la política deben ser los tiempos del país. Tenemos demasiada dilación en proyectos que duermen por años en el Senado", dijo Silber.

"El siglo XXI impone la necesidad de contar con procesos legislativos más ágiles", dijo Saffirio. "El bicameralismo ralentiza el proceso legislativo y lo hace más conservador, dada la composición del Senado", agregó Rincón.

El presidente de la Cámara, Aldo Cornejo (DC), también apoyó la idea.

Para los democratacristianos, el tema no es nuevo y no constituye una idea aislada. En el Congreso Ideológico de la DC de 2007 se propuso eliminar el bicameralismo, con el apoyo de figuras influyentes del partido, como Gutenberg Martínez.

COMUNISTAS Y SOCIALISTAS

En el PC tampoco resulta una materia ajena. "Siempre hemos tenido como planteamiento el sistema unicameral, para tener una sola institución legislativa", comentó el presidente PC, Guillermo Teillier.

De hecho, la otra reforma en carpeta pertenece al jefe de la bancada comunista, Hugo Gutiérrez, quien ya comenzó a socializar su propuesta con otros legisladores. Incluso le pidió su adhesión al jefe de diputados de RN, Nicolás Monckeberg, quien evaluaría el tema.

En el PS también hay simpatizantes de la idea. El jefe de bancada socialista, Marcelo Schilling -quien apoyó un proyecto del actual senador Carlos Montes en la materia en 2008-, expresó su respaldo a avanzar en la unicameralidad. "El Senado fue instalado como la cámara conservadora, la guardiana del statu quo. En Chile, el Senado fue instalado para contener los ímpetus de liberales y federalistas", dijo Schilling.

Su par PS Daniella Cicardini también apoyó la unicameralidad y, en un primer paso, presentó una reforma que rebaja a 21 años el requisito de edad para ser senador. Hoy, la Constitución exige 35 años cumplidos para llegar al Senado.

ARGUMENTOS

Una de las justificaciones para la existencia de dos cámaras es que funcionan como un mecanismo de control mutuo. De esta forma, se suele decir que una cámara ejecuta y la otra revisa, pero a juicio de algunos diputados esto no ocurre.

"Los senadores casi repiten la misma pega que estamos haciendo nosotros", afirmó el diputado Farías, mientras Farcas dijo que "podríamos tener un ahorro sustantivo de tiempo y recursos".

Otro de los argumentos en favor de la bicameralidad es que los senadores representan territorios (por ejemplo, una región) y los diputados a grupos poblacionales. No obstante, algunos legisladores dicen que la reforma al binominal rompe ese modelo, ya que muchos diputados tendrán territorios tan grandes como los senadores. Además, mencionan que al aumentar el número de senadores en Santiago, Valparaíso y el Biobío, ya no existe el equilibrio.

Si bien el debate de la unicameralidad no es un tema que se pueda incluir en la actual reforma electoral, la apuesta -dicen- es dejar un precedente para la próxima discusión de la nueva Constitución.