Claudio Bravo no será transferido al Valencia tras ser descartado definitivamente por la directiva de ese club, que se encuentra en plena búsqueda de un tercer portero a pedido de su técnico, Unay Emery.
Como se sabe, el estratego hace tiempo anda tras los pasos del capitán de la selección chilena. De hecho, hace unas semanas detuvo la renovación de César para insistir en su fichaje. Al final, el experimentado guardavallas amplió su vínculo por una temporada más.
Pese a ello, en los últimos días se produjo un nuevo acercamiento entre la directiva de Real Sociedad y el cuadro "ché". ¿El motivo? Unay Emery había solicitado un tercer portero para la próxima temporada y otra vez puso el nombre de Bravo como prioridad.
Valencia pidió precio y preguntó por los trámites del pasaporte comunitario, y desde San Sebastián respondieron que a partir de julio podría optar a la doble nacionalidad. Al final, quedaron en hablar nuevamente cuando ese plazo se cumpliera.
Horas después, la directiva finalmente tomó la decisión de desechar la opción del chileno. ¿Por qué? En España aseguran que la determinación obedece a una cuestión "ética", puesto que indagando más sobre Bravo se encontraron con la "sorpresa" que comparte agente con... Unay Emery.
Así, Valencia fijó su mirada en Miguel Angel Moyá, titular del Mallorca, y por quien ya se encuentran negociando. Bravo, por su parte, sigue en la Real Sociedad. Por ahora.