El equipo médico del hospital de Pichidegua, encabezado por su director Francisco Araneda, enfrentan desde hoy un juicio oral luego que la fiscalía determinara que habían falsificado una alcoholemia en beneficio del director del establecimiento.
La instancia judicial se realiza en el Juzgado de Garantía de Rancagua y de acuerdo a los hechos expuestos por el Ministerio Público, en diciembre de 2007 Araneda llegó de urgencia al establecimiento tras protagonizar un accidente automovilístico en evidente estado de ebriedad, informa radio Cooperativa.
Uno de los facultativos identificado como Andrés Pérez Gutiérrez junto a otros dos paramédicos adulteraron el examen, haciendo que uno de los funcionarios se tomara una muestra de sangre que fue cambiada por la de Araneda.
"Cuando recibimos la alcoholemia, que llegó con grado cero, nos llamó la atención, pues teníamos en el parte policial que él sí tenía aliento etílico. Pedimos un informe de ADN, que arrojó que la sangre de la muestra no era del imputado, sino que era de Pedro Muñoz (paramédico)", aseguró el fiscal Aquiles Cubillos.
El director del hospital de Pichidegua ya había sido condenado por conducción e estado de ebriedad y obstrucción a la investigación. El profesional podría ser sentenciado a cinco años de presidio.