El director ejecutivo del Bank of America, Kenneth Lewis, se retirará de su cargo a fin de año, según informó el banco hoy, luego del cierre bursátil.

No se informó sobre los motivos del retiro de Lewis, de 62 años, quien también dejará su cargo en el Consejo de Administración.

El comunicado cita a Lewis diciendo que es un buen momento para el recambio generacional en la dirección del banco. Mientras tanto, el banco ya está en situación de reembolsar las ayudas estatales y la integración de Merrill Lynch y de la financiera inmobiliaria Countrywide se desarrolla conforme a los tiempos previstos.

Lewis había estado últimamente bajo presión entre otros motivos, porque la entidad financiera está en el punto de mira del organismo de supervisión bursátil estadounidense (SEC) y de la Fiscalía de Nueva York.

La SEC considera que el Bank of América no había informado debidamente a sus accionistas el pago de US$5.800 millones en concepto de bonificaciones a directivos de Merryll Lynch.

En el marco de un acuerdo quedaron sin efecto las acusaciones a cambio de un pago de US$33 millones. Sin embargo, hace dos semanas atrás, el juez a cargo rechazó el acuerdo.

El banco se defiende contra esas acusaciones y exige al tribunal que rechace las acusaciones en su contra. También el fiscal general de Nueva York, Andrew Cuomo, realiza investigaciones en relación con la adquisición de Merril Lynch.

Lewis había elaborado el acuerdo a mediados de septiembre de 2008 con el presidente de Merrill Lynch, John Thain, lo que significó también el fin del banco de inversión Lehman Brothers y convirtió al Bank of America como la institución que probablemente socorrería al banco de inversión en bancarrota.

Sin embargo, la adquisición de Merrill Lynch que había sido considerada un celebrado golpe se convirtió rápidamente en un desastre. Merrill Lynch descubrió a fin de año una inesperada e importante pérdida de más de US$20.000 millones, por lo que Thain debió abandonar la institución.

Tal como sucedió con otras entidades crediticias, Bank of America abandonó hace pocos días el fondo de protección estatal de US$45.000 millones (30.774 millones de euros). Bank of America pagará US$425 millones (290 millones de euros) en contrapartida por las garantías que en su momento le prestaron el Ministerio de Finanzas y la Fed.