Datafolha es considerada una de las encuestadoras más prestigiosas de Brasil. Perteneciente al Grupo Folha, fue fundada en 1983. En entrevista con La Tercera, el director general de la firma, el sociólogo Mauro Paulino, analiza el escenario que se abre para Lula y el Partido de los Trabajadores (PT) tras el histórico fallo judicial de ayer en Porto Alegre.

Pese al categórico fallo de segunda instancia de ayer, Lula aún puede presentar recursos judiciales. ¿Podría tener tiempo para inscribir su candidatura presidencial el 15 de agosto?

Sí. Existen recursos que pueden alargar el proceso hasta la víspera de la homologación de las candidaturas, el 15 de agosto, pero la condena unánime dificulta ese proceso. Además, la impugnación de un ex presidente que dejó el gobierno con un 83% de aprobación y que podrá permanecer como líder de las intenciones de voto mientras sea candidato se vuelve más rara a ojos de la opinión pública mientras más se acerque la fecha de las elecciones.

La presidenta del PT, la senadora Gleisi Hoffmann, dijo hace unos días que Lula, "condenado o no, será candidato". ¿Cree que el partido puede radicalizar su actitud, sacando a sus partidarios a las calles para presionar al gobierno?

No creo que el PT radicalice fuertemente su discurso, arriesgándose a aumentar el rechazo al partido y dificultar el crecimiento del posible sustituto. El PT no es tan popular como Lula y una radicalización muy fuerte, más que atraer, ahuyentaría a los electores. Sin embargo, estimo que el PT mantendrá la candidatura de Lula hasta agotar los recursos.

En caso de que Lula finalmente no sea el candidato del PT, ¿cuál es el plan B del partido? ¿El ex alcalde paulista Fernando Haddad sería la opción?

Hasta ahora, Haddad parece ser la opción más fuerte, seguido por el ex ministro y ex gobernador de Bahía, Jacques Wagner. Ambos tendrían que hacerse conocidos por todo el país para conquistar el máximo de votos a partir del apoyo a Lula. Entre quienes tienen la intención de votar por Lula hay cerca de 30% que votaría por un candidato apoyado por él. Sin embargo, cuando se presenta el nombre del ex alcalde de Sao Paulo, Fernando Haddad, y del ex gobernador, Jaques Wagner, los rechazan: 61% y 63%, respectivamente, no votarían por ellos. Darían su voto a Haddad 14%, y 21% quizás lo haría. Wagner registra 13% de apoyo y un 19% de "tal vez". Por eso necesitarían tener algo de tiempo para conquistar a los demás potenciales electores. Será una estrategia interesante para seguirla, en el caso de que ocurra.

Entonces, ¿qué opciones tiene el PT de ganar las elecciones sin Lula como candidato?

Aún sin ser candidato, Lula permanecerá como el personaje central de la elección. Su popularidad entre los más pobres, especialmente en las regiones norte y nordeste del país, sumada a la fuerte posibilidad de transferencia de votos, no permite descartar al PT como uno de los posibles ganadores.

¿El gobernador de Sao Paulo, Geraldo Alckmin, será el candidato del PSDB? ¿El PMDB del Presidente Michel Temer tendrá candidato?

Todo indica que sí, el candidato del PSDB será Alckmin, incluso porque su competidor más cercano, el actual alcalde de Sao Paulo, João Doria, perdió popularidad en los últimos meses. El PMDB analiza lanzar el nombre de Temer en el caso de que la economía confirme los signos de recuperación y con eso genere una posible disminución de su rechazo, que hoy supera el 70%. Lo más probable es que el PMDB haga una coalición con Alckmin, en caso de que él logre un mejor desempeño en las próximas evaluaciones.

¿La opción electoral del diputado ultraconservador Jair Bolsonaro se fortalece? ¿Podría ganar sin la presencia de Lula como candidato?

Puede fortalecerse un poco. Lula lidera en todos los escenarios presentados por la última encuesta de Datafolha, con hasta 36%. En las simulaciones en que no figura, el 6% de sus seguidores afirma que elegirían al diputado federal Jair Bolsonaro (PSC-RJ). En sentido contrario, la migración es mayor: hasta un 13% de los electores que votarían por el parlamentario (sin Lula en la disputa) respondieron que apoyarían al petista en el caso de que él estuviera en la pelea. Existen electores que, ante el escenario de mucha corrupción, crisis económica, se vuelven más pragmáticos. Van a mirar al que resuelva la situación como entiende más rápida y eficiente, independientemente del color político. Como la violencia urbana es uno de los factores que más preocupan a los brasileños, los candidatos que presenten soluciones fáciles, aunque no sean factibles, pueden conquistar electores de todos los espectros en esa área.