Dos liceos de San Felipe están siendo asesorados por la Universidad de Viña del Mar (UVM) para mejorar su gestión directiva y curricular-pedagógica, así como la convivencia y la inclusión en sus respectivas comunidades educativas.
Estos establecimientos reciben la consultoría profesional de la Escuela de Educación UVM, en el marco de la estrategia para establecimientos prioritarios y preferentes diseñada y llevada a cabo por el Ministerio de Educación, establecimientos donde las deficiencias no son pocas.
Según el profesor Juan Francisco Uriona, coordinador de la asesoría UVM, "hay graves problemas de índole política, administrativa, cultural, económica y social, que afectan el modo en que los actores de esos liceos perciben la realidad y, por ende, su rol como estamentos y la forma en que asumen sus responsabilidades en el proyecto educativo".
COLAPSO DE ESTRUCTURAS
A juicio del equipo pedagógico de la UVM, en los liceos asesorados "falta una visión sistémica, hay una excesiva concentración de actividades que colapsan sus débiles estructuras, no hay plena autonomía de los directores para estructurar sus equipos de trabajo, y es exigua la cantidad de recursos, comparada con los establecimientos particulares subvencionados, y qué decir de os particulares pagados".
Uriona explica que la responsabilidad política del sostenedor, del Ministerio de Educación y de sus representantes regionales y provinciales resulta muy relevante para los liceos, pero que "desgraciadamente estamos muy lejos de una acción articulada y cooperativa que sea capaz de superar las barreras políticas e ideológicas y culturales que caracterizan nuestro subdesarrollo y nuestros problemas de gestión a todo nivel".
LA IMPORTANCIA DEL LIDERAZGO
En tal contexto, los docentes UVM han buscado contribuir a mejorar la realidad educativa de los liceos. "Hemos aprendido a trabajar con los actores partiendo por escuchar y conocer, pero también para interpelar, provocar, para romper la inercia propia de sistemas, a veces cerrados, en su modus operandi, en su cultura organizacional, en la rutina y en la pesada carga que deben llevar los docentes en esas realidades. Claro que comprendemos dicha carga, pero ésta no puede justificar el estancamiento en el desarrollo de los establecimientos", comenta Juan Francisco Uriona.
El académico agrega que "cuando hay un liderazgo claro en un liceo -donde el director o la directora busca guiar al establecimiento, da responsabilidades y exige resultados, brinda espacios de reflexión, diálogo y discusión, y hace un seguimiento de los procesos y promueve la evaluación-, entonces éste va en el camino correcto. Es lo que sucede en el Liceo Roberto Humeres", asegura Uriona.
CÓMO SON LOS LICEOS PRIORITARIOS
Puesto en marcha en el año 2007, el programa dirigido a establecimientos prioritarios y preferentes del Ministerio de Educación, considera la asesoría técnica para 768 liceos del país, que necesitan una estrategia especial para elevar sus resultados de aprendizaje.
Son establecimientos que atienden a alumnos de familias de bajos ingresos y cuyos padres suelen tener baja escolaridad; al mismo tiempo, han registrado un muy bajo puntaje en el Simce y altas tasa de retiro y repetición.
Uno de los tres grupos en que los 768 liceos han sido divididos, es el de los prioritarios. Estos reciben, por parte de instituciones asesoras -como la UVM-, asistencia técnica externa integral e intensiva por tres años.
Actualmente el equipo UVM que participa en la iniciativa está conformado por las profesoras Ximena Nercellas, de la Sede San Felipe, quien trabaja en gestión curricular como asesora en matemáticas; Carlos Troncoso, cuya colaboración se concentra en la gestión directiva del Liceo San Felipe; Juan Alberto Parra, quien se encarga de la convivencia y la inclusión; y Juan Francisco Uriona, asesor en gestión directiva del Liceo Roberto Humeres.