Durante los últimos meses los ojos de la opinión pública han estado puestos en las investigaciones que lleva el Ministerio Público, por las muertes ocurridas en los centros dependientes del Servicio Nacional de Menores (Sename).
Pero lejos de ser un inconveniente, eso le ha permitido a su directora, Solange Huerta, realizar una serie de cambios al interior de servicio que hasta ahora han pasado prácticamente inadvertidos.
El primero de ellos fue registrar los problemas de salud que presentan algunos de los menores internados en los centros, para posteriormente priorizar su atención. La gestión fue realizada junto al Ministerio de Salud y con la colaboración del Colegio Médico, que ha realizado varios operativos en distintos lugares del país.
Además, desde noviembre de 2016, se comenzó a hacer un catastro para registrar las personas que están institucionalizadas. El trabajo fue hecho por el Ministerio de Desarrollo Social a través de la Subsecretaría de Evaluación Social.
Sin embargo, comentan desde el Sename, lo más importante es que a partir de abril la selección de directores regionales y altos cargos dentro del organismo se hará a través del sistema de Alta Dirección Pública (ADP), lo que permitirá que las nuevas autoridades tengan un perfil más técnico y acorde con la entidad. Algo que se concretó gracias a un convenio con el Servicio Civil.
Otra novedad tiene que ver con la intención de Huerta de profesionalizar el servicio. Y es que, según ha comentado a sus colaboradores, la directora aspira a que exista una carrera que combine conocimientos relacionados con psicología, salud y educación.
La idea es saldar una deuda pendiente con los funcionarios, quienes han manifestado en reiteradas ocasiones la falta de preparación que tienen las educadoras de trato directo que trabajan con los menores.
Eso sí, tendrá que explorar si existe interés en el ámbito educacional para generar una carrera con esas características.