Discriminación laboral por estética: se busca empleados lindos
Aunque es políticamente incorrecta, existe, y marca algunas contrataciones, ascensos y los salarios.
El día en que despidieron a Gabriela (nombre ficticio) de su trabajo, su jefe le hizo un comentario que no ha olvidado: "Ojalá que en tu nuevo empleo no te amurres y aprendas a caminar bien, como las modelos". Gabriela jamás esperó ver a su superior mofándose de ella e imitando su forma de andar. Quedó perpleja, pero, en ese momento, comprendió el verdadero motivo de su salida. "Yo no respondía a los estándares de belleza de la empresa. Mis compañeras eran atractivas y lucían mejor que yo", admite esta ingeniera y MBA en administración, que alcanzó a estar sólo siete meses en una compañía minera, a pesar de haber superado un riguroso proceso de selección de personal.
Casos como éste no son aislados en Chile. La estética sí influye a la hora de encontrar trabajo,mantenerse y ascender. Al menos así lo piensa el 86 % de los chilenos que dice que en este país existe discriminación laboral por la apariencia, mientras un 61 % afirma haberse sentido rechazado por su aspecto, según la encuesta Lindos y Feos realizada en 2008 por la empresa de oferta de empleo Trabajando.com Chile.
El gerente general de esta firma, Nicolás Salas, añade que "existe discriminación laboral determinada por la estética. Debemos entender que los procesos de selección son, por definición, discriminatorios, lo que pasa es que hay una discriminación negativa y otra razonable, que tiene que ver con la relación de los resultados del negocio".
Las áreas más sensibles son, según este profesional, las comerciales, donde predomina el contacto directo con el cliente, como ocurre en los cargos de recepcionistas, secretarias y ejecutivos de cuentas, y, también, en el sectorminero y la abogacía.
Noris Quesada, presidenta del sindicato de una importante multitienda en Valparaíso, da fe de ello. Comenta que la discriminación "se da muchísimo en las sucursales de las grandes tiendas. Se busca un perfil que agrade a la vista, porque lo primero es convencer al cliente de llevar lo que quiere y, en ese sentido, un físico atractivo ayuda". Y agrega que "es difícil ingresar a estas tiendas siendo gordita, no muy agraciada y de piel oscura. A veces también ocurre que en estos trabajos las mujeres engordan –en los hombres ocurre menos– y empiezan a cambiarlas de un departamento más lucido a otro con menor visibilidad".
BELLEZA RENTABLE
La apariencia física, además, tiene consecuencias en el salario. El economista Daniel Hamermesh, de la Universidad de Texas, fue uno de los primeros en denunciar este hecho a nivelmundial. En su estudio Por qué la Belleza Importa (2005) indica que, en elmundo, los trabajadores "lindos" ganan entre un 10 % y un 15 % más que el promedio "normal". En EE UU, por ejemplo, los hombres calificados de "feos" reciben un 9%menos que los considerados atractivos, y lasmujeres, un 6 % por debajo que las más bonitas. En el caso de Inglaterra los varones ymujeresmenos agraciados ganan salarios hasta un 18 % y 11 % inferiores, respectivamente.
¿Y en Chile qué? Según Claudia Sanhueza, directora académica de la Universidad Alberto Hurtado y autora del estudio La Belleza y su Efecto en el Mercado Laboral: Evidencia para Chile (2008), las disparidades salariales por el aspecto de una persona son considerables: lasmujeres bonitas pueden recibir un 33 % más que el promedio y los hombres feos hasta un 36 % por debajo.
Pero el "premio" a la belleza o el "castigo" a la fealdad están presentes sólo en los años iniciales. "Confirmamos que este efecto disminuía en lamedida en que los profesionales habían estado más tiempo en una empresa, porque los empleadores alcanzaban a percatarse de su verdadera productividad", puntualiza Sanhueza. En esto coincide Birgit Nevermann, de la empresa de búsqueda y oferta de empleo Laborum: "La belleza tiene un tiempo límite. Si no va asociada a la inteligencia emocional tampoco perdura".
ELLAS, LAS MÁS AFECTADAS
Uno de los grupos más perjudicados por la discriminación estética en los trabajos son lasmujeres. María de los Ángeles Fernández, directora ejecutiva de Fundación Chile 21, resalta que, a pesar de los esfuerzos realizados por el Gobierno de Michelle Bachelet por la paridad e incorporación femenina, las mujeres no perciben avances. Y apunta a la EncuestaMujeres y Política 2007 de la Corporación Humanas que indica que el 88 % de las consultadas se consideró discriminada, sobre todo, en el terreno laboral (98 %). Entre las razones está que ellas tienenmás dificultades para encontrar trabajo por apariencia, edad y embarazo (38 %).
"A las mujeres se nos pide que seamos buenas personas, madres y, además, bonitas", comenta Carolina Franch, antropóloga y magíster en estudios de género y cultura de la Universidad de Chile.
Consciente de que la exigencia de armonía física existe en el trabajo, el Servicio Nacional de la Mujer (Sernam) incluyó criterios estéticos en su programa Mejorando la Empleabilidad de las Mujeres Jefas de Hogar que se desarrolla desde 2006 a través de los municipios. "Las participantes demandan una atención integral en salud que contemple nutrición y deporte paramejorar su autopercepción y valoración, y que les permita incorporarse al trabajo. Por otro lado, este programa ofrece prestación dental gratuita bajo la premisa de que el mejoramiento de la estética facial de las mujeres (al mismo tiempo que la salud bucal) elevará sus oportunidades para acceder a un empleo", explica Pamela Caro, coordinadora del Programa Ciudadanía Laboral del Centro de Estudios para el Desarrollo de la Mujer (Cedem).
Pero, a veces, la discriminación funciona en el sentido contrario. La belleza como limitante. Carmen Espinosa, periodista de 38 años, recuerda que la despidieron de una radio por reducción de personal, pero un año después un ex compañero le comentó que otro de los motivos fue su apariencia. Por entonces su jefa "no quería que distrajera a sus compañeros". Carmen admite que su aspecto físico –es delgada, de pelo liso y tez blanca– ha sido un tema importante en la mayoría de los trabajos donde ha estado.
La cara más visible de la exclusión laboral en Chile se da en las ofertas de trabajo que aparecen en periódicos y sitiosweb. La Dirección de Trabajo en 2005 detectó que, a pesar del artículo 2 del Código del Trabajo –que prohíbe a los empleadores exigir raza, color, edad, estado civil, entre otros– el 12,28 % de estos avisos contenía al menos un requisito discriminatorio que vulneraba la igualdad de oportunidades. Cuatro años después, persisten las publicaciones de avisos que buscan trabajadores "lindos" para cubrir cargos que demandan competencia, esto es, conocimientos y habilidades.
PRIMERA DISCRIMINACIÓN: LA FOTO
El sicólogo Matías Montenegro creó el sitio despitutados.cl para denunciar irregularidades en este ámbito. El profesional, que tiene años de experiencia asesorando a postulantes a empleos, explica que en Chile está prohibido solicitar currículumcon fotografías, pero a nadie se le impide mandarlas ni recibirlas. Por ello, él aconseja no adjuntarla, "porque aunque después discriminen, el que postula almenos tendrá la oportunidad de llegar a la entrevista y demostrar su habilidad, por muy feo, gordo y raro que sea. Usar fotos es discriminatorio, ya que influye en nuestra percepción". Nicolás Salas, de Trabajando. comChile, en cambio, recomienda que el postulante ponga su foto para generar cercanía con el entrevistador, pero dice que "si se quiere avanzar en el tema de la discriminación laboral, habría que prohibir a la gentemandar foto o a las empresas recibirla". Por otra parte, agrega que las empresas "están preocupándose, cada vez más, de lo que deben". Birgit Nevermann, de Laborum, explica que esto se debe a que hoy existe más profesionalismo en la selección de personal. "Muchas empresas están cambiando en eso, porque el rol del departamento de recursos humanos es lograr que ingrese a la compañía la persona idónea, independientemente de su color de piel, sexo y edad".
GARANTÍAS DE IGUALDAD
La profesionalización en este tipo de procesos es deseable, pero, al parecer, no es algo generalizado. Karen (nombre ficticio), sicóloga que participó en un segunda etapa de selección para contratar vendedores, jefes de ventas y bodegueros de dos aperturas de una conocida multitienda del país, no dudó en divulgar su historia.
Cuenta que formó parte del equipo evaluador en abril de 2008. Su tarea consistía en tomar los test sicológicos a aquellos postulantes que habían superado la entrevista personal. El punto es que los candidatos llegaban donde los sicólogos con una ficha que estabamarcada por un símbolo que determinaba quiénes estaban ya aprobados o rechazados y que, sin embargo, seguían formando parte de un proceso que ya estaba definido. "El proceso era súper irregular. Tampoco era ético someter a la gente a pruebas innecesarias para después no considerarla. No había listas ni indicaciones por escrito, pero yo sabía que parte de lasmotivaciones para rechazar a una persona respondían al hecho de que eran mamás con hijos menores de dos años, personas con apariencia poco estandarizada –góticos o con pintamedio estrafalaria–, que no hablaban bien, usaban frenillos o eran obesas".
Aun así, no denunció. "Quise hacerlo, perome dijeron que las denuncias a este tipo de empresas quedaban en multas ridículas y no lograbas nada, más todavía si la presenta alguien que está empezando su carrera, como yo. Es complicado", explica.
"Cuando se es testigo o víctima de la discriminación laboral no es fácil reconocer el hecho ni denunciarlo. Se interponen el miedo, el desconocimiento y la falta de fe en conseguir resultados", dice el sicólogo Matías Montenegro. "También está la tendencia de ver de manera natural una serie de supuestos que permiten la discriminación. Se trata de una mirada que posiciona a alguien en otro escalón, bloqueando su empatía y responsabilidad hacia ella o él", añade la sicóloga María Alicia Halcartegaray de la Universidad Católica. Por lo mismo, "todos somos responsables, pero nadie siente que realmente lo es. Nadie cuestiona nada", concluye.
La encuesta Lindos y Feos (2008) de Trabajando.com refleja esta situación. Cuando se pregunta por las razones de la discriminación, el 36% (el 8% más que en 2007) afirma que se debe a que existen algunos empleos donde la apariencia física es importante; un 25 % (28 % en 2007), responde que las empresas valoran más la imagen; y otro 25 % (15 % en 2007), dice que es porque somos superficiales. Estadísticas en mano, Nicolás Salas señala: "No esperábamos que el número de personas que validaran la discriminación fuera tan alto, ya que con eso la gente está diciendo que se discrimina, porque la belleza sí es importante para el desempeño laboral. Pero esta valoración cayó casi diez puntos de un año a otro. En este sentido mejoramos, al menos como sociedad".
La antropóloga Carolina Franch se siente pesimista al respecto y comenta que las estadísticas muestran "una violencia simbólica, donde tú eres tu propio policía, porque encuentras que está bien lo que te han hecho creer, sin cuestionarlo".
Todos estos argumentos hacen difícil la denuncia. Además, "en Chile se reconoce el derecho a la no discriminación laboral, pero faltan acciones para defenderlo en los tribunales. Esto es grave, porque sin una protección eficaz los derechos fundamentales corren el riesgo de convertirse en poesía y nuestro Estado de Derecho en un castillo de naipes que se derrumba cada vez que un trabajador desea ejercer sus derechos", señala Eduardo Caamaño, profesor de la escuela de Derecho de la Universidad Católica de Valparaíso y autor del libro El Derecho a la No Discriminación en el Empleo (2005). Sin embargo, el abogado asegura que "el tema es más bien de carácter cultural y no legal".
Esto lo tiene claro Franch: "Chile es un país discriminador, racista y clasista, porque el aspecto físico expresa una condición de clase, de género y de raza que generamarcas, algunas bien valoradas y otras no. Tú no discriminas a la persona por fea; rechazas su origen y pertenencia. Entonces, tenemos que preguntarnos qué hacer para que esto no ocurra".
Sin embargo, los cánones occidentales de belleza siguen exigiendo un prototipo a los que pocos chilenos pueden responder: delgado, alto, tez clara... Por eso, no es de extrañar que un 40% de las mujeres diga que está medianamente, poco y nada feliz con su cuerpo, como indica la encuesta Los Chilenos y su Cuerpo, realizada por La Tercera (2006).
PLAN DE EMERGENCIA ESTÉTICA
A RelookMed, centro de asesoría y desarrollo de la imagen profesional y personal, acuden hombres y mujeres que quieren mejorar su vida emocional y/o laboral. Llegan hasta allí por interés propio, o bien, enviados por sus jefes. "Las empresas no nos piden imponer a sus empleados exigencias estéticas determinadas; sólo quieren que los profesionales representen la imagen de la compañía. A partir de ese objetivo nosotros desarrollamos un plan estratégico", señala Maritza Añazco, directora de esta firma.
Sin embargo, Añazco admite que existen dos errores comunes: trabajadores que piensan que no necesitan adaptar su estilo a la compañía y empresas que creen que las personas de un nivel educacional más alto las representan mejor. Pero ni lo uno ni lo otro. Esta especialista dice que lo deseable es potenciar los atributos de cada persona, no cambiarla ni copiar modelos externos. Eso sí, la preocupación por la estética no se transa, porque "si yo presento un perfume Dior en un envase de plástico no será bien valorado".
El plan estratégico que ofrece RelookMed comienza con un estudio morfológico de la persona para determinar sus necesidades. Luego, se desarrolla un informe sobre el cual tres estilistas y cosmetólogos trabajan de lamano de la cromoestética, es decir, el uso del color en la estética. Amodo de ejemplo, se recomienda que las personas con pelo negro no usen tonalidades naranjas, porque no les favorecen. Paralelamente, sicólogos y orientadores ofrecen cursos de coaching y de programación neurolingüística para que los profesionales ganen en seguridad y autoestima.
"Me enseñaron a maquillarme y estoy contenta. Los cambios no fueron drásticos, porque la idea era mantener mi estilo. A mi me lo recomendaron, ya que trabajar en la bolsa de dinero exige verse impecable. Hay que andar arreglado sí o sí", comenta Francisca (nombre ficticio) de 35 años, soltera, sin hijos que trabaja en un banco desde 2008. Distinto es el caso de Cristián (nombre ficticio), que "quería conseguir una imagen más sólida para avanzar en mi carrera. Fue una cosa más personal".
Pero no hay que exagerar. Otros profesionales aseguran que poner el acento en la apariencia es una trampa. Para Pamela Caro, coordinadora del Programa Ciudadanía Laboral del Centro de Estudios para el Desarrollo de laMujer (Cedem), "el físico en términos de cuerpo saludable y armónico es totalmente atendible, pero estamos frente a un problema cuando existe una sobrevaloración de lo físicomarcado por estereotipos tradicionales occidentales que termina inhibiendo o disimulando la participación pública". Y concluye: "las mujeres chilenas debemos romper e ir más allá de las imágenes femeninas estereotipadas, aceptar las diferencias estéticas y afirmar nuestra autoestima no sólo en lo externo, sino por sobre todo, en el reconocimiento de nuestras capacidades, conocimientos y habilidades sociales. Ello permitirá enfrentarse mejor a la vida y al mundo laboral".
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