La policía reprimió a manifestantes en dos poblados del norte de China quienes protestaban después de que casi muchos niños sufrieran envenenamiento por plomo que aparentemente emanaba de un fundidor cercano, según reportes difundidos el lunes.

Los disturbios representan una señal más del creciente odio popular hacia la contaminante industria china.

Cientos de residentes destrozaron vallas y bloquearon el tráfico en la entrada de las empresas Dongling Lead y Zinc Smelting Co. en la provincia de Shaanxi, tras enterarse de las noticias sobre los envenenamientos la semana pasada, dijeron medios estatales de noticias y residentes.

Los padres enfadados se enfrentaron a los agentes de policía y apedrearon camiones que transportaban carbón a la fábrica.

No se informó de forma inmediata sobre arrestos o heridos. Las autoridades locales, la policía y trabajadores de las empresas rechazaron confirmar los reportes.

El rápido desarrollo económico chino ha dejado a gran parte de su suelo, aire y vías fluviales peligrosamente contaminadas y el número de disturbios con ciudadanos afectados por la polución está aumentando.

Las autoridades prometen con regularidad cerrar las empresas que contaminan de manera problemática, pero no suelen cumplir con las promesas debido a la importancia de la industria para las economías locales.

Por lo menos 615 de los 731 niños en dos poblados cercanos al fundidor de Dongling han dado positivo en pruebas de envenenamiento por plomo, que puede afectar a los sistemas nerviosos y reproductivos y provocar alta presión sanguínea, anemia y pérdida de la memoria.

Los niveles de plomo encontrados en los niños eran 10 veces más altos que los considerados seguros en China.

Se descubrieron niveles inusualmente altos de plomo en el fundidor de Shaanxi durante pruebas realizadas para comprobar la calidad del aire, reportó la agencia noticiosa oficial Xinhua. Aún así, las autoridades dijeron que la basura de la empresa, así como las aguas subterráneas y en la superficie, además del suelo, cumplían con los estándares nacionales.