Novak Djokovic se clasificó este viernes para la final de Roland Garros al derrotar al letón Ernests Gulbis (18°) en cuatro mangas por 6-3, 6-3, 3-6 y 6-3, en 2 horas y 34 minutos de juego.
"Nole", segundo sembrado del torneo, jugará el domingo por el trofeo con el vencedor del duelo entre el español Rafael Nadal, número uno mundial y defensor del título, y el británico Andy Murray (7°).
El serbio, que aspira al único Grand Slam que falta en su colección, se mostró muy sólido en las dos primeras mangas ante un tenista en un gran momento de forma que venía de ganar al suizo Roger Federer y al checo Tomas Berdych. Gulbis, un punto menos consistente, cedió dos veces su servicio, lo que le costó verse dos sets por abajo. En la tercera manga logró, tras mucho sufrimiento, romper por fin el saque al serbio y se hizo con el set.
El relativo orden que había imperado en las tres primeras mangas se rompió al comienzo de la cuarta. Los jugadores intercambiaron roturas y Djokovic perdió la calma que le había acompañado durante todo el torneo. Tras un error clavó la mirada en su equipo técnico y lanzó la raqueta al suelo. Abucheado por el público, levantó los brazos para pedir disculpas.
Pero fue sólo un espejismo, el mayor acierto y frescura física del número dos mundial se impuso a un Gulbis que cometió excesivos errores no forzados en la recta final.
La victoria de "Djoker" presiona al español que defiende la corona y además su posición en el ranking. Solo ganar el torneo le sirve para mantenerse como el mejor de la clasificación ATP, pues de lo contrario quedará relegado a la segunda plaza.
"Cuando vengo aquí a París para Roland Garros, tengo una gran motivación e inspiración para jugar mi mejor tenis. Después es difícil saber cómo va a salir el torneo, pero en la pista yo doy el máximo", señaló Djokovic, que espera rival para la final, a pie de pista.