El serbio Novak Djokovic, primer favorito, disipó los fantasmas que amenazaron su permanencia en el Abierto de Australia y se impuso al checo Tomas Berdych, quinto cabeza de serie, por 6-1, 4-6, 6-1 y 6-4.

Djokovic, que busca su tercera corona consecutiva en Melbourne, quería evitar una situación similar a la que sufrió ante el suizo Stanislas Wawrinka en octavos, en un encuentro que sacó adelante de forma agónica.

Djokovic enderezó el encuentro con determinación en cuanto asimiló la amenaza de su rival, que igualó el partido en el segundo set.

El serbio será el rival del español David Ferrer en semifinales. El español, previamente, necesitó tres horas y 44 minutos para ganar a su compatriota Nicolás Almagro por 4-6, 4-6, 7-5, 7-6 (4) y 6-2.