El director Emir Kusturica incluyó una escena con sus pacientes en un video para Manu Chao. Francis Ford Coppola realizó una visita al recinto cuando estuvo en Buenos Aires. Es el Hospital Municipal José Tiburcio Borda, una de las instituciones psiquiátricas más venerables de Argentina, fundada en 1863 y que hoy alberga una iniciativa que ya es legendaria: la radio La Colifata, manejada por los propios internos de la institución bajo la guía del psicólogo Alfredo Olivera.
El nombre de la emisora viene del lunfardo porteño "colifato", término cariñoso para llamar a los enfermos mentales. La experiencia ya tiene 18 años y su efecto ha sido tan poderoso que atrajo la atención de personalidades como el conocido locutor Lalo Mir y el ex futbolista Oscar Ruggeri, quienes ayudaron a financiar el estudio de la radio. Incluso, fue replicada en Chile, a través de la emisora Radio Diferencia del Hospital del Salvador en Valparaíso.
Uno de los más recientes registros mediáticos de esta iniciativa es el documental LT 22 Radio La Colifata, del director argentino radicado en España Carlos Larrondo. El filme se estrena mañana en el Centro Arte Alameda y es un seguimiento a la radio y a los internos del Hospital Borda durante cinco años, entre el 2002 y el 2007. "Sólo pasar una tarde en el hospital te cambia la vida para siempre", ha dicho Larrondo.
En la cinta se recogen no sólo los programas de los pacientes, sino que también su experiencia en esta "cárcel sin barrotes", como dice uno de ellos. Un interno repite una y otra vez enlaces radiales con el planeta Marte y explica cómo funcionan las cosas allá. Otro cuestiona a los psiquiatras de la institución: "Dicen que los médicos llevan a cabo lo que Dios les pide en la Tierra. Habría que ver si Dios está contento con los resultados".