Karen Doggenweiler confirmó lo dicho por su esposo, el candidato presidencial independiente Marco Enríquez-Ominami, quien anunció que de ganar los comicios pretende vivir en La Moneda y afirmó que si es Jefe de Estado "va a estar presente las 24 horas del día".
La esposa del presidenciable indicó que "queremos cambiar la forma de hacer política", asegurando que ideas innovadoras como esa son muy buenas y simbólicas. Asimismo, explicó que la candidatura de Enríquez ha estado llena de simbolismos, como la renuncia del candidato a su dieta parlamentaria o su propio alejamiento de las pantallas de TVN para concentrarse en la campaña de su esposo.
Respecto de su eventual rol como primera dama indicó que quiere reformular el cargo, cambiando "los tesitos y labores sociales" por tener un rol más en terreno. "Trabajar junto con los niños, con las mujeres jóvenes que comienzan a trabajar y con las jefas de hogar".
En la misma línea, Doggenweiler indicó a Canal 13, que ha recorrido muchas veces Chile por lo que conoce muy bien el país. Pretende volcar todas esas experiencia y transmitirle a Marco las urgencias, "ser los ojos donde él no pueda estar".
Si bien se reservó el derecho de hacer uso del sufragio secreto y no quiso revelar cuáles han sido sus preferencias políticas, manifestó que considera que "la Concertación se ha transformado en una coalición fatigada".
La ex animadora de Pelotón afirmó que "junto a muchos, creímos que el triunfo del No iba a ser el triunfo de todos, y finalmente intentaron dominar algunos". Del mismo modo, manifestó que nunca antes hubo "una generación tan preparada para gobernar, una generación que no se siente atraída por estas malas prácticas que se vienen arrastrando".
