"Vuelo hacia Alemania", fue el último mensaje que recibió Álvaro Medrano de su hijo Luis, uno de los dos colombianos que viajaban en el vuelo de Germanwings que se accidentó en los Alpes Franceses, con 150 personas a bordo de distintas nacionalidades, en su mayoría alemanes y españoles, que no pudieron sobrevivir.
Luis Medrano, de 36 años, "ya se venía a vivir a Colombia, después de trabajar en el extranjero por años. Había traído las maletas a Popayán para radicarse del todo", contó su padre al diario colombiano El Tiempo.
La cancillería colombiana señaló a María del Pilar Tejada como la otra colombiana que viajaba en la aerolínea. Tejada, de 33 años, estudiaba un doctorado en Economía Ambiental en la Universidad de Colonia (Alemania), hacia donde se dirigía en esta ocasión.
El Ministerio de Relaciones Exteriores señaló en un comunicado que el Gobierno de Colombia expresa "sus más sentidas condolencias" a los familiares de los fallecidos, cuyas identidades habían sido reveladas horas antes por fuentes de su entorno.
Aunque, la mayoría de las víctimas del vuelo eran de Alemania. La aerolínea informó que 67 de los ocupantes pertenecían a este país. Uno de los sucesos más lamentables que se conocieron fue la muerte de 16 adolescentes, del centro educativo Joseph-König-Gymnasium, de la localidad de Haltern, que estaban de intercambio en España.
Los chicos, de entre 15 y 16 años, estuvieron a punto de perder el vuelo porque a una de las estudiantes se le quedó la documentación en su casa de acogida. La Familia española le llevó su pasaporte al aeropuerto de El Prat y finalmente terminaron por abordar el Airbus.
"Es el día más negro en la historia de la ciudad", dijo el alcalde de Haltern Bodo Klimpel que añadió que la comunidad se encuentra "en estado de 'shock'. Es lo peor que podríamos imaginar".
En tanto el Gobierno de España dijo que en la lista de pasajeros había 45 personas con apellidos españoles, sin que por el momento se pudiera precisar su nacionalidad.