La celebración como retrato de un pueblo. Multitudes reunidas en torno a sus santos, la Virgen o la Pachamama. Fiestas que se transmiten de generación en generación desde hace más de cinco siglos. Chile en fiesta, el trabajo fotográfico de Catalina Riutort y Alejandra Undurraga, pone el foco sobre estas celebraciones populares llenas de color. La muestra es parte de la sección oficial del Festival Internacional de Fotografía y Artes Visuales PHotoEspaña, que comienza el 4 de junio y se extenderá hasta el 27 de julio.

Catalina Darraidou, gestora del proyecto, fue quien propuso a ambas fotógrafas registrar estas celebraciones, tras participar en algunas fiestas típicas de España, como la Semana Santa y San Jordi. Publicaron un primer libro, titulado Chile en fiesta, donde retrataron 20 celebraciones de todo el país. Fiesta en el desierto, su segunda publicación, registró 15 fiestas de la zona de Atacama. La exposición que ahora llega a Casa de América de Madrid, tras exhibirse en Logroño y Cádiz, es una selección de ese material. "Habiendo participado de estas 35 fiestas a lo largo de Chile, nos damos cuenta de las diversas formas de celebrar y cómo esto enriquece a las personas. Es una forma de preservar nuestro patrimonio como país y, a la vez, un reflejo de una identidad muy particular de cada pueblo y cada ser humano", dicen las artistas.

Chile en fiesta es una de las 107 exposiciones que conforman el programa del festival, el de mayor envergadura en Hispanoamérica. Creado en 1998, en esta nueva edición pondrá la mirada sobre la fotografía española. Los visitantes podrán conocer la historia de la disciplina en ese país, pero también asomarse a la obra de grandes fotógrafos locales y extranjeros.

Entre las muestras destaca Pinceladas, una panorámica de Lillian Bassman, una de las figuras más importantes de la fotografía de moda, así como Retratos de papel, de Chema Conesa, quien ha capturado con su cámara a figuras como Pedro Almodóvar, Francis Bacon y Francis Ford Coppola.

La exposición Fotografía 2.0 pone de relieve las transformaciones que ha experimentado la imagen con los nuevos medios digitales. Los expositores de esta muestra nacieron después de 1970, fueron criados por la televisión y el cine, y comparten un discurso crítico sobre esta nueva escena. La banalización del acto fotográfico, el voyerismo exacerbado y la pérdida de la intimidad son parte de sus temas.

Otra de las atracciones será La Palangana, que recoge el trabajo de este colectivo surgido a finales de los 50. Este grupo, poco conocido dentro de la historia de la fotografía hispana, puso su mirada en la periferia de la ciudad y en los pueblos, así como en la vida cotidiana.

El Museo Reina Sofía, la Biblioteca Nacional, el Círculo de Bellas Artes, la Fundación Loewe y Matadero Madrid son algunas de las sedes del festival, que este año se extiende también a las estaciones del Metro.