El porcentaje de niños menores de 15 años en Japón, con respecto a la totalidad de la población, es exactamente la mitad de los mayores de 65. Una proporción alarmante para las autoridades del archipiélago, considerando que -a la luz de la tendencia actual- la brecha no hará más que ampliarse. Es decir que mientras disminuye la población de niños, aumenta la de personas de la tercera edad. Se trata del 33er. retroceso anual del grupo etario de cero a 15 años, desde el inicio de estas estadísticas en 1950 en Japón.
Según las estadísticas dadas a conocer por el Ministerio de Asuntos Internos en vísperas de la celebración del Día del Niño en Japón, que se festejó esta semana, el país contaba el 1 de abril pasado con 16,33 millones de niños de menos de 15 años, un descenso de 160.000 respecto de hace un año. Así, desde mediados del siglo XX se han reducido en más de 13 millones los habitantes de Japón que se ubican en ese rango de edades. Los menores representan 12,8% de la población, la cifra más baja jamás registrada. En tanto, el porcentaje de personas mayores de 65 años es de 25,6%, otro récord, pero esta vez al alza.
En 1950, los niños conformaban el 35,4% de la población, uno de cada tres japoneses. Pero la proporción ha descendido gradualmente, salvo por un breve repunte durante un "baby boom" en la década de 1970, tras lo cual se retomó la continua tendencia a la baja a partir de 1982.
Este envejecimiento de la población se debe a una combinación de factores, como la baja tasa de fertilidad y las altas esperanzas de vida. Pero también puede considerarse en este caso la reducida entrada de inmigrantes, ya que en muchos países, especialmente europeos, la población no decrece gracias a la llegada de extranjeros y/o a la tasa de fertilidad de esas minorías foráneas. Un reciente informe de Naciones Unidas estima que Japón necesitará aceptar unos 17 millones de inmigrantes antes de 2050 para enfrentar sus problemas poblacionales.
Tokio y Okinawa fueron las únicas prefecturas que registraron un aumento en el número de niños en comparación con el año anterior. La prefectura con proporción de niños bajo los 15 años en relación con la población más alta de Japón fue Okinawa (17,6%), en el sur del país, y la más baja fue la prefectura de Akita (10,9%), en el norte. Los niños entre 12 y 14 años de edad constituyen el grupo más numeroso de todo el rango de cero a 15 años, con 3,51 millones de individuos, mientras que el grupo que incluye a los recién nacidos hasta los dos años de edad es de 3,14 millones.
Estas cifras sitúan a Japón como el país de al menos 40 millones de habitantes con la menor tasa de niños en su población, según la agencia Jiji. Así, en Estados Unidos y en Francia el rango es de 19,5%; en China, de 16,4%, y en Alemania es de 13,2%
En 2060, la proporción de habitantes de 65 años o más será del 40% de la población en Japón, según previsiones del Ejecutivo. Recientemente, el gobierno local expresó su preocupación por los problemas demográficos del país. Eso, porque hay estudios que sostienen que con las actuales tasas de natalidad y mortalidad, Japón tendrá un poco más de 50 millones de habitantes en 2096, menos de la mitad de los 127 millones de habitantes censados en 2012.
Sin embargo, mucho antes del fin de este siglo se teme que el envejecimiento de la población provoque problemas en el sistema de pensiones y desequilibre el aparato nacional de salud. Precisamente, para contrarrestar esa tendencia, se han puesto en marcha diversas leyes para favorecer que las parejas tengan más hijos en el país asiático.