La Policía Militar del estado de Sao Paulo (sureste de Brasil) mató en servicio a 185 personas en el primer trimestre de 2015, la cifra más alta desde el mismo periodo de 2003 y 28 abatidos más que en el primer trimestre de 2014.
El promedio de sospechosos muertos en choques con la policía alcanzó las 2,05 personas al día en el estado más poblado de Brasil (44 millones de habitantes), según datos de la Secretaría de Seguridad del estado de Sao Paulo divulgados el lunes.
En el lapso el número de heridos fue de 105 personas, mientras que cuatro agentes perdieron la vida en acto de servicio y 43 acabaron con lesiones tras una intervención.
Estos números prolongan el aumento de muertes que comenzó en el primer trimestre de 2014, cuando 157 sospechosos murieron en operaciones de la policía en ese estado.
En los tres primeros meses de 2013 murieron 67 personas, la cifra más baja desde 1996, el segundo año en el que se realizaron estas mediciones.
Tras la divulgación de las cifras del trimestre, la Secretaría de Seguridad del estado de Sao Paulo afirmó que trabaja para reducir los índices de letalidad de la policía.
"La actuación de la policía de Sao Paulo se da estrictamente dentro de los límites de la ley. Las excepciones son investigadas con rigor y acaban con el castigo de los policías acusados de delitos. En 2014, 128 policías militares fueron despedidos y 177, expulsados", explicó en una nota a la AFP la autoridad de seguridad del estado de Sao Paulo.
Más de 2.200 personas fueron asesinadas por la policía brasileña en 2013, seis por día en promedio, según un estudio realizado en noviembre por el Foro Brasileño de Seguridad Pública. Además, 490 agentes murieron en el mismo periodo en Brasil, 75% de ellos fuera de sus horas de trabajo.
Durante los últimos cinco años, la policía brasileña mató a 11.197 personas, según el estudio, que calculó que el coste de la violencia en el mayor país de Sudamérica, donde se producen de media 45.000 homicidios anuales, equivalía al 5,4% de su PIB.