El Banco Central Europeo mantendrá una política monetaria laxa por el tiempo que tome llevar la inflación extraordinariamente baja de la zona euro hacia el objetivo de una tasa cercana al 2 por ciento, dijo el miércoles su presidente, Mario Draghi.
Draghi dijo a una emisora de radio francesa que el BCE hará todo lo que pueda para estimular el crecimiento pero reafirmó que los países de la zona euro necesitan poner en forma a sus economías.
"La política monetaria seguirá siendo expansiva por un largo tiempo y puedo decirle que el consejo de gobierno (del BCE) es unánime en el compromiso de emplear las herramientas que tiene a su disposición para devolver a la inflación justo por debajo del 2%", dijo Draghi a través de un intérprete en una entrevista para Europe 1.
En cuanto a las señales de crecimiento en otras zonas de la economía mundial, dijo que la política del BCE seguiría siendo expansiva "aún cuando la política monetaria de otros países pueda reconocer gradualmente que está teniendo lugar una recuperación".
Draghi ha sugerido en los últimos días que el banco central está listo para emplear instrumentos adicionales no convencionales para estimular la inflación y el crecimiento, pero hizo notar: "Las tasas de interés seguirán bajas por que no pueden bajar mucho más".
Sobre los esfuerzos de países como Francia para impulsar medidas con objeto de hacer más competitivas a sus economías, Draghi dijo: "El riesgo de hacer muy poco es mayor que el riesgo de hacer demasiado. Estas reformas se han planeado durante años y ahora tienen que implementarse".
Draghi dijo que no veía peligro de una deflación en la zona euro y añadió que el mayor riesgo viene del desempleo.