Identificar los hogares que encienden chimeneas y estufas a leña durante los días críticos de alta contaminación es la misión de la aeronave pilotada a distancia, o dron, que el Ministerio de Medio Ambiente utilizará para ayudar en la fiscalización de las viviendas que infrinjan la normativa. Esta prohíbe el uso de este tipo de calefacción en la Región Metropolitana durante los días en que se decreta alerta, preemergencia y emergencia ambiental.
"Buscamos focalizar los esfuerzos de fiscalización con un dron para seguir cumpliendo la normativa (...); nos da una oportunidad de fiscalizar cientos de casas a la vez, de manera que los inspectores del Ministerio de Salud se dirijan hacia los lugares donde se está infringiendo la norma", dijo el ministro de Medio Ambiente, Marcelo Mena.
Esta herramienta será probada como piloto durante un mes. Volará a una altura de entre 100 y 120 metros y, según el Ministerio de Medio Ambiente, tendrá un radio de fiscalización de un kilómetro. Su objetivo es ayudar a elaborar un mapa referencial de los domicilios que utilizan este tipo de calefacción, información que luego será entregada al Ministerio de Salud para que los fiscalizadores de la Seremi se presenten en los domicilios para verificar el incumplimiento. De ser así, el usuario arriesga una multa que parte en $ 46.740.
Mena agregó que "esta herramienta nos ayudará cuando exista prohibición permanente de calefactores a leña", según lo determina el nuevo plan de descontaminación de Santiago, que entraría en vigencia en 2018.
Al respecto, el subsecretario de Salud Pública, Jaime Burrows, celebró la implementación de esta herramienta como ayudante en la fiscalización y dijo que "en momentos de preemergencia y emergencia por contaminación, contamos con 20 fiscalizadores para toda la Región Metropolitana. Cuando se producen estos episodios recibimos muchas denuncias y atender todas al mismo tiempo se hace difícil (...), esperamos que si el uso de dron es efectivo podamos expandirlo al resto del país".
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Foto: Karin Pozo/Aton Chile[/caption]
No obstante, la incorporación de la tecnología de drones y globos aerostáticos implementados en las comunas de Las Condes y Lo Barnechea, con fines de seguridad pública, ha sido cuestionada por distintas organizaciones ciudadanas. Afirman que ponen "en riesgo" el derecho a la privacidad de las personas, e incluso han recurrido a la justicia con recursos de protección en estos dos casos anteriores.
"El uso de drones lo miramos con preocupación, porque la única regulación que existe es con fines recreativos, lo que no es suficiente cuando éstos se usan en materia de seguridad pública o vigilancia (...). No queda claro si esta vez solo se identificarán chimeneas, o si la cámara podrá identificar personas, cómo va a ser el tratamiento de las imágenes o cuándo serán borradas. Al no haber legislación al respecto aquí se podrían vulnerar derechos como la privacidad del hogar", afirma Romina Garrido, directora de la ONG Datos Protegidos.
El analista de políticas públicas de la organización Derechos Digitales, Pablo Viollier, agrega que "la captación de imágenes de las chimeneas implica que se grabarán las casas, por lo que hay una clara vulneración al derecho a la inviolabilidad del hogar. Por fallo de la Corte Suprema, los globos aerostáticos no pueden grabar en espacios privados, pero como no hay regulación para los drones, ahora vemos que ellos sí lo podrán hacer".
Al respecto, el intendente metropolitano, Claudio Orrego, afirmó que el procedimiento se ajustará al dictamen del fallo de la Suprema que el año pasado permitió el uso de globos aerostáticos para vigilancia en Lo Barnechea. "Las imágenes hay que borrarlas, tienen que ser a cierta altura y no tienen que ser invasivas. No nos interesa la vida privada, sino saber si sale humo de las chimeneas".