Múltiples repercusiones generó en Italia la determinación del técnico de Inter, José Mourinho, de reemplazar al ghanés Sulley Muntari por practicar el Ramadán.
El técnico de Inter de Milán reconoció que sustituyó al jugador por no encontrarlo el plena forma física, justo en el momento en que realiza la práctica religiosa.
"El ayuno no es lo mejor para un futbolista. Muntari tenía problemas relacionados con el Ramadán y hacía mucho calor", explicó el técnico.
El hecho de inmediato encontró reacción en las organizaciones islámicas de Italia. Precisamente, el presidente de la Unión de Comunidades y Organizaciones Islámicas de Italia, Mohamed Dachan, cargó contra el técnico.
"El ayuno no debilita la forma física de un futbolista. Mourinho debería hablar un poco menos. El Instituto de Medicina del Deporte dice que la estabilidad mental y psicológica que da la religión puede ser un plus en el campo para un jugador", dijo el dirigente.
El Ramadán es el noveno mes del calendario musulmán, conocido por ser el mes en el que los musulmanes realizan un ayuno diario.
