Tras recibir 146 denuncias, la Dirección del Trabajo estimó pertinente emitir su opinión respecto a las quejas por disconformidad con los contratos, que presentaron trabajadores de la ex isapre Masvida traspasados a Óptima (que hoy opera como "Nueva Masvida"). Esto tras la compra de cartera de la fallida isapre de médicos, por parte e Nexus, controlador de Óptima.

En el dictamen la DT aclaró la plena aplicación del principio de continuidad de la empresa que consagra el articulo 4 inciso 2° del Código del Trabajo, según el cual las modificaciones totales o parciales a la propiedad de una empresa "no alterarán los derechos y obligaciones de los trabajadores emanados de sus contratos individuales o de los instrumentos colectivos de trabajo, que mantendrán su vigencia y continuidad con el o los nuevos empleadores". Los trabajadores acusaron que para continuar trabajando en la empresa, se les obligaba suscribir un anexo de contrato, con dos cláusulas que dejaban "sin efecto cualquier acuerdo previo y/o contrato y/o estipulaciones contractuales".

Según el dictamen, tras varias entrevistas a encargados de personal de Óptima, se constató la instrucción de ofrecer a los trabajadores un nuevo contrato, no habiendo claridad sobre el futuro de quienes no firmaran. En defensa de la aplicación de la continuidad laboral, la DT recurre incluso al propio convenio entre Nexus y Masvida de abril pasado, en el que se establece que "Nexus, de manera directa o a través de su filial Óptima, han adquirido la totalidad del activo que poseía Masvida". Es decir "Óptima, en materia laboral, ha pasado a ser la continuadora de Masvida". añade.

La DT cuestionó que "ante la hipótesis de continuidad analizada resulta improcedente la suscripción de nuevos contratos individuales o instrumentos colectivos, el otorgamiento de finiquitos y el pago de indemnizaciones por término de contrato, por cuanto las originales relaciones laborales no han terminado y se mantienen vigentes con el nuevo empleador". En tal línea, enfatiza que "no le es posible a la empresa Óptima, alterar lo consignado en contratos individuales ni colectivos de trabajo, sin contar con el consentimiento del trabajador". Dice que la propuesta de Nexus de contratar trabajadores en el convenio, "es ilegal ya que condiciona el acceso al empleo a factores sin relación con capacidades técnicas o idoneidad del trabajador".

El gerente general de Óptima, Luis Atabales, sostuvo que "esto tiene que discutirse en los tribunales laborales", y que las quejas responden a un grupo de trabajadores cuyos contratos anteriores contenían remuneraciones "absolutamente fuera de mercado", y que lo que se ofreció a todos fue el mismo contrato vigente para el 70% de los trabajadores, de manera de no discriminar. Sobre el acuerdo con Masvida, aclara que lo que ofreció Óptima es una alternativa para evitar finiquitar a todos los empleados, pero "no asumir la responsabilidad completa".

En tanto, el 1° juzgado de Letras del Trabajo ordenó la reincorporación de Jeannette Bernal, presidenta el Sindicato Unificado Nacional de Empresas Masvida, y a Sergio González, además del pago inmediato de las remuneraciones y demás prestaciones adeudadas derivadas de la relación laboral desde el despido. Ambos trabajadores se negaron a firmar los nuevos contratos, por lo que no se les permitió seguir trabajando en las oficinas de Masvida desde mediados de mayo. Habría 119 trabajadores en igual situación y 100 llevando juicios por este tema. Bajo la perspectiva de Atabales, estos no son trabajadores de Óptima, sino de la ex Masvida.