El regalo por su segundo título consecutivo de campeón del mundo de Fórmula 1 está ya decidido, pero los elogios le vienen por adelantado: Sebastian Vettel puede ganar el título el domingo en el Gran Premio de Singapur y hasta en Red Bull sorprende su incontestable dominio.
"Sebastian es único", dijo en una entrevista con la agencia dpa el dueño de la escudería Red Bull, el millonario austriaco Dietrich Mateschitz, de 67 años.
"Que Sebastian es capaz de tener un alto rendimiento lo sabíamos todos. Pero que lo mantenga con esa continuidad es sorprendente para muchos", dijo.
Piloto y patrón marchan de la mano hacia el segundo título consecutivo de conductores y de marcas. "Didi y yo tenemos una relación muy especial", dijo a dpa Vettel, que con 24 años puede ser el bicampeón mundial más joven. Y lo puede lograr ya de forma matemática el domingo en la noche de Singapur.
Con sólo 12 años, Vettel entró en el programa de Red Bull, que ya tiene preparado el regalo por el más que posible título: "Al igual que el año pasado: el coche con el que será campeón", reveló Mateschitz, que no estará el domingo en Singapur.
Vettel acumula en lo que va de año ocho triunfos, cuatro segundos puestos y un cuarto.
A su equipo le entusiasma tanto el rendimiento del piloto alemán como su simpatía. "Ambas cosas son enormemente importantes para nuestro equipo", destacó Mateschitz.
"Los éxitos confirman al equipo de que es capaz de construir un coche ganador, y que esos triunfos lleguen a casa además con tanta simpatía, juventud y alegría es ya algo insuperable", señaló el austriaco, que creó un imperio a partir de la venta de bebidas energéticas.
Vettel mantiene los pies en la tierra. No ha despegado pese a que parece que su coche dispone de las alas que son imagen de la marca. Tampoco Mateschitz, que en 2005 compró el equipo Jaguar y formó su propia escudería. A pesar de los éxitos de un hombre hecho a sí mismo, no cae en la vanidad.
"Creo que nuestra relación se encuentra en un muy buen equilibrio", dijo Mateschitz sobre la duradera asociación entre Red Bull y Vettel.
"Sebastian nos agradece que le estemos acompañando ya durante más de diez años, y no sólo por que le hayamos llevado a la Fórmula 1, sino también por haberle puesto a disposición un coche campeón. Y nosotros le agradecemos que haya justificado ese esfuerzo no sólo con su talento, sino también con una increíble fuerza de voluntad, profesionalidad y disciplina", explicó a dpa el gran jefe del imperio energético, que ahora marca la pauta en la Fórmula 1 por delante de escuderías históricas como McLaren o Ferrari.
Mateschitz aseguró que el alemán y el australiano Mark Webber componen una pareja de pilotos perfecta para el equipo. "Se puede ganar con ambos, aunque sus personalidades y su manera de encarar las cosas son diferentes. Es una pareja ideal", señaló Mateschitz a pesar de los roces vividos entre ambos, sobre todo en 2010.
Desde 2009 comparten equipo. Mientras Vettel, de 24 años, tiene contrato hasta final de 2014, Webber, de 35, firmó recientemente hasta diciembre de 2013.
"El compañero de equipo es el primer rival a batir. Se puede por lo tanto hablar más de competencia y de intereses propios que de trabajo en equipo. Es el caso de Mark y Sebastian. Eso ocurre justo en interés del equipo, pero sin que se regalen nada", añadió el austriaco.
Mateschitz no está dispuesto a frenar la euforia en el equipo. Mantendrá a sus dos pilotos y en 2012, año en el que no hay previstos muchos cambios técnicos, el equipo será de nuevo el mejor colocado para lograr el triplete. "Las expectativas son muy grandes, por supuesto, y no seremos nosotros los que las rebajen".