Mientras continúan las investigaciones judiciales en España por presunta corrupción del esposo de la infanta Cristina, Iñaki Urdangarin, la pareja comenzó a retomar en Washington sus actividades públicas mediante citas seleccionadas cuidadosamente, en una ciudad donde todavía pueden guardar un cierto anonimato.
Si la semana pasada era la hija de los reyes de España la que se dejaba ver en un think tank de la capital estadounidense, hoy fue el propio Urdangarin el que aparecía de forma inesperada en otro de los numerosos centros de estudios de esta ciudad.
El duque de Palma Mallorca acudió hoy a un encuentro en el Centro Woodrow Wilson sobre las relaciones entre Estados Unidos y Brasil de cara a la próxima visita de la Presidenta Dilma Rousseff a Washington.
El marido de la hija de al medio de los reyes de España escuchó la conferencia, en la que participaron altos funcionarios del gobierno de Barack Obama, en una de las primeras filas del auditorio.
Consultado por periodistas, Urdangarin indicó posteriormente que había acudido por motivos profesionales. En Washington, el duque de Palma trabaja como consejero de Telefónica Internacional.
Sin embargo, el duque negó hacer declaraciones sobre su caso, manteniendo así el silencio que ha guardado desde su regreso de España.
A finales del mes pasado el Urdangarin estuvo durante largas horas ante el juez José Castro, quien lo ha imputado en un caso de malversación de caudales públicos, prevaricación, falsedad documental y fraude a la administración, durante el tiempo en el que estuvo al frente del Instituto Nóos, una organización en teoría sin ánimo de lucro.