Economista dice que regalos de Navidad son "un desperdicio de dinero"
Joel Waldfogel, autor del libro "Scroogenomics: Why You Shouldn't Buy Presents for the Holidays", señala que las fiestas son una orgía de destrucción de valor para la economía.
La Navidad es un desperdicio de dinero porque la gente que da regalos sobreestima cuánto serán disfrutados por quienes los reciben, dijo el economista Joel Waldfogel.
"La manera en la que celebramos la Navidad en el mundo desarrollado es con una orgía de destrucción del valor que vaporiza US$25.000 millones por año", dijo ayer en una conferencia en Londres. "La gente valora los objetos que recibe como regalo un 20% menos por dólar gastado que las cosas que compran para ellos mismos. Se trata de artículos que no se ajustan a sus gustos".
Waldfogel, profesor de Economía de la Wharton School de la Universidad de Pensilvania, es el autor de "Scroogenomics: Why You Shouldn't Buy Presents for the Holidays". Sus conclusiones se basan en encuestas realizadas entre las personas sobre los regalos recibidos en una temporada en la que se gastan unos US$65.000 millones en regalos en Estados Unidos y que las ventas al por menor en Europa y Japón aumentan.
Una manera obvia de evitar el desperdicio en los regalos sería dar dinero en efectivo, ya que esto daría a los receptores la libertad para comprar exactamente lo que quisieran, dijo Waldfogel. No obstante, en realidad eso no es posible, ya que las convenciones sociales desaprueban el uso del dinero como regalo.
La gente tampoco puede optar por pasar por alto las fiestas, porque intercambiar regalos es una práctica social muy arraigada. Y si bien el placer de regalar es también una razón para dar regalos, quienes regalan quizá no quieran dar algo que es exactamente lo que se desea, dijo Waldfogel.
Waldfogel dijo que dar regalos más meditados es una solución para nuestros seres cercanos, y que las tarjetas de regalo, que evitan el "estigma" del efectivo, son buenas para las personas que uno no conoce bien y con quien se tiene la obligación de regalar.
Comenta
Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.