En una conferencia de prensa a la que asistió el pleno de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF), presidida por Carlos Villacís, se oficializó el alejamiento del seleccionador Gustavo Quinteros.
El equipo del Guayas tuvo un gran comienzo en las Eliminatorias para Rusia 2018, pero su rendimiento decayendo al extremo de que hoy marcha antepenúltimo en la clasificatoria sudamericana, sólo delante de Bolivia y Venezuela, y con muy reducidas posibilidades de alcanzar siquiera el cupo de repechaje de la Conmebol, cuyo ganador enfrentará a Nueva Zelanda.
A primera hora, Quinteros había declarado que "La gente que me conoce, sabe la respuesta. Yo nunca voy a renunciar a un proceso ni un proyecto. Tenemos posibilidades de clasificar. No me siento un cobarde para irme. Hay muchas chances para clasificar, ojalá todo el mundo piense de la misma manera", en una entrevista con una radio de Guayaquil.
El asunto molestó sobremanera a los directivos, quienes querían arreglar una salida amistosa del entrenador de origen argentino y nacionalizado ecuatoriano. Incluso esperaban reunirse con él durante la mañana del miércoles, pero sus dichos apuraron la decisión. "Ante las públicas declaraciones realizadas por el señor Gustavo Quinteros..." fue la primera frase incluida en el comunicado entregado por la FEF, aludiendo además al incumpliento de la meta que el entrenador se había impuesto: "Ganar tres de los últimos partidos" de la eliminatoria, lo que ya no sucedió luego de la caída como local ante Perú por 1-2.
Su reemplazante será Jorge Célico, quien trabajaba con las selecciones menores ecuatorianas, quien estará en la banca ante Chile (Santiago, 5 de octubre) y Argentina (Quito, 10 de octubre).
