"Durante la preparación de este evento, oficiales militares de nuestros países clarificaron el escenario del ejercicio, para asegurarse que todas las audiencias comprendieran claramente la naturaleza del ejercicio -que no es ofensivo- y para dar la mayor transparencia para los vecinos de la región.
Esto fue importante para evitar cualquier mala interpretación sobre el ejercicio", señaló a La Tercera un portavoz de la representación diplomática.
En ese sentido se destacó que "el gobierno de Chile trabajó arduamente para promover la buena voluntad y dar el máximo de transparencia en relación con el ejercicio Salitre".
El portavoz de la embajada expresó que esperaban "con interés otras oportunidades para que nuestros militares puedan entrenarse con naciones amigas".
En tanto, fuentes chilenas de Defensa comentaron que el embajador de EE.UU. en Chile, Paul Simons, fue uno de los principales promotores ante el ministro de Defensa, Francisco Vidal, para que se modificara la hipótesis inicial del ejercicio. Actualmente se trabaja con la simulación de un dictador en una isla.
En cambio, el libreto original, que molestó al gobierno de Perú, planteaba que un país ficticio del norte invadía a uno del sur, incumpliendo tratados internacionales, lo que obligaba la intervención de una fuerza de paz de Naciones Unidas.
Consultado por las sugerencias de Washington para ajustar la hipótesis, ayer, Vidal dijo en Iquique, al inaugurar la nueva Escuela de Caballería Blindada del Ejército, que no hubo ningún planteamiento "formal" del gobierno de EE.UU., pero admitió que hubo contactos a otro nivel.
"Cuando eso ocurre se hace a través de los canales diplomáticos y la Cancillería no ha recibido ninguna sugerencia formal de parte del gobierno de Estados Unidos. Me consta que hubo conversaciones a nivel de las fuerzas aéreas, pues insisto, todo el espíritu detrás del ejercicio Salitre es de cooperación", afirmó al respecto.
A su vez, el canciller Mariano Fernández señaló que "si yo tuviera alguna información no me corresponde proporcionársela a la opinión pública".