El Departamento de Defensa estadounidense anunció hoy la cancelación de sus ejercicios conjuntos con las Fuerzas Armadas Reales tailandesas a raíz del golpe de estado que dio el Ejército del país asiático hace unos días.
"Como hemos dejado claro, es importante que las Fuerzas Armadas Reales de Tailandia terminan este golpe y restauren tanto los principios como el proceso democrático para el pueblo tailandés, así como un camino claro para unas elecciones", dijo el portavoz del Pentágono, John Kirby, en un comunicado.
"Aunque hemos disfrutado de una larga y productiva relación de militares a militares con Tailandia, nuestros propios principios democráticos y la ley de EE.UU. requieren que reconsideremos la ayuda militar y los compromisos (hacia el país), agregó.
En consecuencia Kirby enumeró la cancelación de los ejercicios conjuntos de formación y cooperación para el año 2014 entre los dos cuerpos militares, así como las visitas del Comandante de la Flota del Pacífico estadounidense, el almirante Harry Harris, que tenía pensado viajar en junio a suelo tailandés; y la del Comandante General de las Fuerzas Armadas tailandesas, Tanasak Patimapragorn a EE.UU., también el mes que viene.
"Vamos a seguir revisando los compromisos adicionales que sean necesarios hasta el momento en que los acontecimientos en Tailandia ya no lo exijan", agregó Kirby en la nota.
"Instamos a las Reales Fuerzas Armadas de Tailandia para actuar para los mejores intereses de sus conciudadanos, poniendo fin a este golpe de Estado y la restauración del Estado de Derecho y las libertades a través de los principios democráticos", concluyó el portavoz.
La junta militar de Tailandia disolvió hoy el Senado y apartó de sus funciones a tres altos cargos con responsabilidades en seguridad considerados próximos a la corriente política del Gobierno depuesto y su líder, Thaksin Shinawatra.
En las últimas horas la junta militar también ha derogado la Constitución y creado un nuevo Gobierno formado por generales que pretende realizar reformas políticas y económicas sin que de momento haya puesto un plazo para devolver el poder a un Gobierno civil.