El Gobierno de Estados Unidos negó hoy jueves que el contratista detenido en Cuba desde hace un mes esté vinculado con sus agencias de espionaje, como alega el régimen de La Habana.
"Esa persona no está asociada con nuestros servicios de inteligencia", dijo P.J. Crowley, portavoz del Departamento de Estado.
El miércoles, el presidente del Parlamento cubano, Ricardo Alarcón, afirmó que el hombre, que no ha sido identificado, trabajaba para una empresa "que contrata para los servicios secretos norteamericanos".
Alarcón dijo que el estadounidense forma parte de la "privatización de la guerra" adoptada por el Gobierno estadounidense.
El contratista fue arrestado el 5 de diciembre pasado tras distribuir, según Estados Unidos, computadores portátiles, teléfonos móviles y otros equipos tecnológicos en la isla.
"El individuo en cuestión estaba allí como parte de un proceso por el cual seguimos animando y ayudamos a los ciudadanos cubanos a hacer lo que los ciudadanos de la mayoría del resto del mundo hacen: conectarse a internet, comunicarse, ofrecer y expresar sus opiniones", dijo Crowley.
El estadounidense trabaja para la empresa privada Development Alternatives, con sede en las cercanías de Washington, que se dedica a labores de desarrollo.
El 28 de diciembre pasado, diplomáticos de Estados Unidos pudieron reunirse con el detenido, tras recibir el beneplácito del Gobierno cubano.