Estados Unidos rechazó la propuesta de Corea del Norte de una investigación conjunta sobre el ciberataque a Sony Pictures, y pidió ayuda a China para bloquear estas ofensivas informáticas de Pyongyang.

Washington responsabiliza a Pyongyang del ataque cibernético sufrido por Sony Pictures, que canceló el lanzamiento este mes de su cinta The Interview, una comedia sobre un plan de la CIA para matar al líder norcoreano Kim Jong Un.

La producción del film, que debía ser estrenado el día de Navidad, provocó un profundo malestar en el aislado país comunista gobernado por Kim, tercer miembro de su familia que ostenta el poder.

Corea del Norte ha negado en reiteradas ocasiones ser responsable de los ataques informáticos, que implicaron la publicación de cientos de correos electrónicos internos, datos salariales, números de seguridad social de trabajadores y hasta guiones en preparación.

Además, Pyongyang propuso a Estados Unidos "una investigación conjunta sobre este incidente" para hacer frente a esas acusaciones "sin fundamento y  difamatorias. Corea del Norte amenazó asimismo con "graves consecuencias" en caso de que Washington rechace la propuesta de una investigación conjunta.

Pero el portavoz del Consejo Nacional de Seguridad estadounidense, Mark Stroh, rechazó de plano la proposición: "Si Corea del Norte quiere ayudar, debe admitir su culpabilidad y compensar a Sony por los daños que el ataque ha provocado".

Según expertos consultados por la AFP, Sony podría perder hasta 500 millones de dólares.

Estados Unidos ha pedido a China su ayuda para bloquear ciberataques norcoreanos, informó el sábado un alto funcionario estadounidense.

"Hemos hablado de esta posibilidad con China para compartir información, expresamos nuestra preocupación por este ataque y pedimos su cooperación", dijo  el funcionario de la administración norteamericana a la AFP.

Pyongyang había hecho su propuesta de investigación conjunta a Washington  al día siguiente de que el presidente norteamericano, Barack Obama, amenazara  con represalias en respuesta al ataque.

Obama afirmó que Estados Unidos no va a ceder ante "un dictador", y  consideró que Sony "cometió un error" al cancelar el estreno de la cinta, previsto para el 25 de diciembre.

"Causaron mucho daño y vamos a responder. Vamos a responder  proporcionalmente y vamos a responder en el lugar, tiempo y manera que  escojamos", dijo el presidente Obama el viernes, sin dar más detalles.

SIMILITUDES CON OTROS ATAQUES 

Ante las amenazas de los piratas informáticos y la negativa de las  principales salas de cine del país a proyectar The Interview, la compañía  cinematográfica había decidido el miércoles retirar totalmente la película de  los canales de distribución.

El presidente de Sony, en tanto, defendió la decisión tras las declaraciones de Obama y dijo que "el presidente (de Estados Unidos), la prensa y el público son los que están equivocados con lo que ha sucedido en realidad".

Antes de la intervención de Obama, el FBI explicó los indicios que le permitieron concluir que Corea del Norte era responsable del ataque.   

Los informáticos utilizaron un programa malicioso ("malware") para entrar al sistema del estudio y que los ordenadores quedaran inoperativos, lo que forzó a la empresa a desconectar toda su red, explicó el FBI.

Según este organismo, la investigación mostró algunas similitudes con otras aplicaciones maliciosas que han sido desarrolladas por "actores de Corea del Norte".

El sábado, el gobierno de Corea del Sur también responsabilizó a Corea del Norte de organizar el ciberataque y dijo haber reconocido "similitudes entre los ataques contra Sony Pictures y los llevados a cabo contra bancos  surcoreanos y otras (entidades) el mes de marzo del año pasado".

Pese a negar estar en el origen del ciberataque, Corea del Norte criticó a Sony por su película, que calificó de "acto de terrorismo que afecta la  dignidad del líder supremo " del país.

También el diario estatal chino Global Times consideró la cinta The Interview como una "estúpida arrogancia cultural".