La fuerza nuclear de Estados Unidos sufre problemas de falta de motivación y mala gestión que podrían comprometer  su seguridad y efectividad si no se toman acciones correctivas, señaló el  viernes el secretario de Defensa, Chuck Hagel. 

El jefe del Pentágono citó dos informes que revelan cómo la institución  militar, preocupada por las guerras en Irak y Afganistán, ha descuidado su  fuerza nuclear en la última década.

Según Hagel, la revisión del Pentágono "reveló problemas recurrentes que,  si no son enfrentados, podrían socavar la seguridad y efectividad de los  elementos de la fuerza (nuclear) en el futuro".  

Los informes "muestran que una falta de inversión y apoyo a nuestras  fuerzas nucleares a lo largo de demasiados años nos han dejado con muy poco  margen para lidiar con las tensiones crecientes", dijo Hagel a periodistas.

Los reportes surgieron después de un escándalo que involucró a decenas de  pilotos que hicieron trampa en un examen de aptitud para supervisores de  misiles balísticos intercontinentales y luego del despido de varios oficiales  de alto rango por mala conducta, incluido el jefe de la fuerza de misiles  intercontinentales balísticos (ICBM). 

El secretario de Defensa presentó un "plan de acción" que incluye la  reorganización de la estructura de comando, la meta de recuperar el "orgullo"  en la misión, más fondos para equipamiento y personal adicional.

Para ello, estima que será necesario invertir "miles de millones de dólares  adicionales en los próximos cinco años". 

"La causa ha sido la falta de foco, de atención y recursos, lo que ha  resultado en un sentimiento generalizado de que una carrera en la empresa  nuclear ofrece muy pocas oportunidades de crecimiento y avance", señaló.

Para reforzar la motivación, la Fuera Aérea estadounidense dará un aumento  salarial a los integrantes de la ICBM, y entregará una nueva medalla que  reconozca la excelencia en las "operaciones de disuasión nuclear", informaron  funcionarios.

Asimismo, Hagel concedió permiso a la Armada para contratar más civiles que  ayuden a mantener los submarinos equipados con armamento nuclear, y la Fuerza  Aérea planea sumar unos 1.000 integrantes -militares y civiles- a sus comandos  nucleares para cubrir las faltas de personal, informó el Pentágono.

El Departamento de Defensa prevé presentar un pedido de financiación al  Congreso.

Las preocupaciones por la caída del nivel de la fuerza nuclear desde el fin  de la Guerra Fría no son nuevas. El antecesor de Hagel, Robert Gates, ordenó  una revisión en 2008 que llegó a conclusiones similares.