El presidente egipcio, Mohamed Morsi, el jefe del Consejo Militar y ministro de Defensa, Hussein Tantawi, y el ministro del Interior, Ahmad Gamal Eddin se trasladaron al lugar del ataque de ayer, que causó la muerte de 16 guardias de frontera y anunció que habrá tres días de duelo nacional.
"Los mártires y heridos serán honrados como los de la revolución" que derrocó al ex mandatario Hosni Mubarak en 2011, prometió Morsi. La emboscada contra los guardias constituyó un "atentado terrorista significativo", afirmó por su parte el Consejo Militar egipcio en un comunicado.
El documento, difundido hoy, destacó que el atentado "revela los peligros y las amenazas que debe enfrentar el Sinaí e impone que todos ejerciten la máxima vigilancia contra complots de los que Egipto es víctima".
Según el comunicado militar, el comando estaba compuesto por 35 personas y las víctimas fueron atacadas por manos "infieles", y sostenido por los "elementos del sector de Gaza que lanzaron disparos de mortero hacia la zona del paso de Karm Abu Salem". Hamas, que gobierna la Franja de Gaza y es un aliado ideológico de los Hermanos Musulmanes, el partido de origen de Morsi, prometió castigar ejemplarmente a los culpables. "El de ayer fue un crimen odioso", indicó Ahmed Bahar, vicepresidente del Consejo Legislativo Palestino.
Las autoridades egipcias anunciaron además que se realizarán este martes los funerales solemnes de los 16 guardias, en una mezquita de El Cairo, con la participación de Morsi, Tantawi y el jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas, Sami Annan.
Hoy en el Parlamento israelí, el ministro de Defensa, Ehud Barak, dijo que el ataque terrorista debería "servir de despertador" para las autoridades de El Cairo y convencerlas a actuar con determinación contra células islámicas que operan en el Sinaí. "El Sinaí se ha transformado en un lugar en donde prospera el terrorismo mundial", dijo por su parte el vocero militar israelí, Yoav Mordechai.
MOSSAD
En cambio, los Hermanos Musulmanes acusaron al Mossad, el servicio de inteligencia israelí, de estar detrás del ataque a los guardias y de buscar hacer fracasar la revolución egipcia. Por ello, ese partido exigió una modificación de los acuerdos de paz de Egipto con Israel.
El viernes fue liberado en Gaza por parte de las autoridades de Hamas un importante dirigente jihadista, Abu el Walid al-Maqdisi. Un año atrás el activista italiano Vittorio Arrigoni pagó con su vida el intento de los seguidores del dirigente salafita de imponer a Hamas un "intercambio de prisioneros" entre el voluntario italiano y el predicador fundamentalista.
El brazo armado de Al Qaeda en la frontera entre Gaza y el Sinaí egipcio busca, al parecer, dictar a Israel, Hamas y Egipto nuevas reglas.