El nuevo hombre fuerte de Burkina Faso prosigue este lunes sus consultas con las fuerzas políticas y la comunidad internacional en Uagadugú, donde la población burkinesa exige un poder civil tras la caída el viernes del presidente Blaise Compaoré.
En un encuentro con diplomáticos, el teniente coronel Isaac Zida ha prometido la creación de un "órgano de transición dentro de un marco constitucional".
El militar añadió que dicho órgano, que tendrá el poder ejecutivo, "será dirigido por una personalidad de consenso, designada por todos los actores de la vida nacional".
El teniente coronel no precisó ningún calendario, aunque espera que esto se haga "lo antes posible".
Además, el Ejército de Burkina Faso prometió que celebrará elecciones en un plazo de tres meses.
"El poder no me interesa", aseguró en un comunicado, Isaac Zida asegurando que ya empezó las gestiones para la transición.
Un portavoz militar señaló que el objetivo del ejército es sólo evitar el casos en el país.
El domingo una persona murió en una de las multitudinarias manifestaciones de protesta en el país para exigir la participación de la sociedad civil en la transición.
Zida, jefe del régimen de transición, mantuvo ya el domingo reuniones con los embajadores de Francia y de Estados Unidos, dos importantes aliados del país, mientras cuando la comunidad internacional ha condenado la toma del poder por los militares.
Este lunes, las calles de Uagadugú habían recuperado su tráfico habitual, con el usual cortejo de motocicletas. También abrió el gran mercado de la capital, centro neurálgico del comercio -cerrado desde hace varios días debido a los acontecimientos en el país-, igual que los bancos, según constató una periodista de la AFP.