Nadie se escapa de la crisis económica y social que afecta a Venezuela. Tampoco los partidarios del gobierno. Así lo reveló un sondeo realizado por la consultora Alfredo Keller y Asociados, el cual señaló que un 52% de los "chavistas blandos" cree que es necesario un cambio en el país, mientras que este porcentaje alcanza al 28% de los llamados "chavistas duros". El 26% de este último grupo estima que las causas de la crisis se encuentran en el gobierno y el 16% culpa a Nicolás Maduro de los problemas.
El director de la consultora, Alfredo Keller explicó a
La Tercera
que el chavismo en su conjunto ha disminuido de tamaño progresivamente. "No sólo los duros que se convierten en blandos, sino que estos últimos se pasan al bloque de independientes", añadió. Así, indicó que la razón del descontento en este grupo se explica porque "Maduro no es Hugo Chávez". "Maduro ha decidido endiosar la figura de Chávez y mientras más encumbra su recuerdo más se hace un contraste fatal de Maduro con Chávez. 'Chávez resolvía, Maduro no', es lo que dicen", sostuvo.
Respecto de la responsabilidad de la crisis, a nivel general el sondeo reveló que el 33% cree que es culpa del gobierno y el 19% de Maduro. Sólo el 13% afirma que el responsable es la guerra económica y sólo el 1% culpa a Estados Unidos. El estudio fue realizado entre el 16 de febrero y el 13 de marzo a 1.200 personas, ubicadas tanto en zonas rurales como urbanas.
De acuerdo con la encuesta, la imagen negativa de Maduro ha ido aumentando desde que asumió el mando en abril de 2013. Actualmente se sitúa en un 79%, mientras que su imagen positiva cayó drásticamente y ahora se ubica en 20%.
Cuando a los venezolanos se les consultó respecto de qué tan grave es la crisis económica, social y política, el 82% de los entrevistados consideró que era grave y sólo un 16% dijo que no lo era.
En cuanto a la gestión del mandatario, el 65% dijo que no está capacitado para resolver la crisis mientras que el 26% considera que sí lo está.
La encuesta también abarcó las posibles soluciones a la crisis actual. Así, el 44% piensa que Maduro debe renunciar y que se deben anunciar elecciones. En la misma línea, el 25% cree que debe producirse un cambio de políticas socialistas por unas de libre mercado. Por el contrario, el 16% estima que para resolver la actual situación es necesario profundizar el socialismo y el 4% sostiene que hay que eliminar la oposición y las empresas privadas.
Teniendo en cuenta este punto, Keller señaló que "de haber elecciones parlamentarias libres y transparentes en estos momentos la oposición podría ganar la mayoría de la Asamblea Nacional cómodamente", pero aclaró que "la oposición no ha logrado capitalizar la totalidad del descontento que ha provocado el gobierno". Respecto a los problemas cotidianos, un 37% señaló que eran la escasez y las largas filas para comprar alimentos. Un 23% dijo que era la delincuencia y el 21% el costo de la vida.
A mediados de enero, Maduro anunció una serie de medidas en la rendición de cuentas anuales ante la Asamblea Nacional. Entre ellas estaba un aumento del 15% en el sueldo mínimo y una fiscalización a las distribuidoras de bienes y alimentos, para hacer frente al desabastecimiento que viven los ciudadanos que es, según él, producto del "sabotaje económico". Sin embargo, pese a estos anuncios, el pesimismo persiste en la población, porque el 54% cree que la situación empeorará y el 19% piensa que se mantendrá.