En las polvorientas canchas del Cajón del Maipo, Matías Donoso dio sus primeros pasos en el fútbol defendiendo a Unión Victoria. Esa fue la única formación que recibió. Nunca hizo divisiones menores, por lo que tuvo que dar la vuelta larga. Esa a la que muy pocos sobreviven. "El fútbol amateur me dio la enseñanza de que el que quiere, puede. Es mucha la adversidad que se vive en Tercera", recuerda.

En esa categoría conoció a Marcelo Salas, quien lo recibió en el recién fundado Unión Temuco, donde a pesar de ciertas dificultades, logró consolidarse. El Matador ha sido clave en su carrera. "Marcelo ha sido fundamental para mí. El apoyo que me da es incondicional. No sólo lo admiro como profesional, sino que como persona. Es un gigante con el que hablo seguido y que siempre me aconseja". 

Junto con el actual presidente de Deportes Temuco, club dueño de su pase, el goleador de Cobresal creció queriendo reflejarse en Ivo Basay. "Ivo era un gran jugador que admiraba mucho y trataba de repetir su manera de jugar", dice.

Con 28 años, el Tanque reconoce que vive el mejor momento de su carrera. "Este ha sido mi mejor año, he dado pasos importantes. He podido hacer goles con la ayuda de mis compañeros", sostiene.

Asimismo, cuenta que vive una etapa de crecimiento: "Siento que he madurado más, en relación a los otros equipos donde estuve. No sé si las cosas habrán cambiado tanto, pero el tiempo te enseña a no cometer errores. Y también la confianza incide y la importancia de todo lo que hemos realizado como equipo".

Los siete goles que ha convertido en el torneo lo ponen entre las figuras del Clausura. De reojo, también mira a la Selección, que por estos días sufre con la falta de finiquito de sus goleadores.

"Todo jugador se ilusiona con la posibilidad de jugar en la Selección. Es un sueño", expresa. Y agrega, con modestia: "Sé también que la gente que hay es la mejor. No sé, quizás ellos están un peldaño más arriba que yo. Pero sé que tengo cosas, como mi juego y mi estatura (1,86 m.), que me favorecen para estar en la Selección".

Si llega a ser considerado por Jorge Sampaoli, Donoso regresaría a Juan Pinto Durán, donde en 2011 fue convocado para integrar un equipo de sparrings en la víspera de la Copa América de ese año: "Fui a esa selección de Claudio Borghi y Jaime Vera. Fue una muy linda experiencia".

Otro sueño que le queda al oriundo de San José de Maipo es ir al extranjero: "Me gustaría jugar afuera, no importa dónde. Pero hay que ir con tranquilidad. Primero hay que terminar bien este año. Más allá de las aspiraciones personales, lo importante es lo que ocurra con el equipo. Vamos paso a paso".

Los afectos

La tragedia del norte del país obligó a Cobresal a trasladarse a la capital, donde enfrentará el sábado a Ñublense. Donoso cree que esta situación tiene algo positivo. "Jugar en Santiago te permite estar cerca de la familia y esa es otra motivación", indica el atacante, que estuvo una semana sin hablar con sus seres queridos. "Mi familia estaba preocupada, pero lo que nos pasó a nosotros es nada en comparación a lo que vivió la gente de Diego de Almagro", narra.

Por esas personas, el equipo va por su primer título. "Estamos con una ventaja importante, pero falta mucho. Quedan cuatro batallas, y las oportunidades se dan una pura vez en la vida. Tenemos que estar tranquilos y siempre mesurados, porque adelantarse sería faltar el respeto a los demás".