Agitados han sido los últimos días del Barcelona del chileno Claudio Bravo. A las salidas de Zubizarreta y Puyol de la institución y el aparente quiebre dentro del camarín, el cuadro culé suma ahora la suspensión de sus relaciones con la FIFA. La medida blaugrana viene en respuesta a la prohibición de realizar fichajes hasta el 2016, impuesta por el máximo organismo del fútbol.
"Preveo que este tema será el caso Barça en el mundo del fútbol, igual que hace años fue el caso Bosman. El caso Barca será un caso que durará el tiempo que dure, pero no lo perderemos", señaló Bartomeu en conferencia de prensa.
En la misma cita, el timonel anunció que no asistirá a la gala de la entrega del "Balón de Oro", a celebrarse el próximo 12 de enero, en la que Lionel Messi es candidato a quedarse por quinta vez con el título de mejor jugador del mundo. Para ratificar el quiebre con la FIFA, Bartomeu anticipó el pronto envío de "una dura carta" a su presidente, el suizo Joseph Blatter.
Por último, producto de los problemas administrativos y deportivos que enfrenta el conjunto catalán, se anunció al adelanto de las elecciones para el próximo mes de junio.