El cambio climático ha provocado que la nieve de Canadá se derrita más tarde de lo habitual, lo que a su vez ha alargado en diez días el período de hibernación de las ardillas, según un estudio publicado hoy por la revista científica "Nature".

La investigación, llevada a cabo por un grupo de biólogos de la Universidad escocesa de Edimburgo, se centró en la población de ardillas salvajes colombinas (Urocitellus columbianus) de Alberta (oeste de Canadá), que normalmente hibernan durante ocho o nueve meses en las Montañas Rocosas de Norteamérica.

Según Jeffrey Lane, autor principal del estudio, las hembras despertaban de su hibernación medio día más tarde por cada uno de los veinte años que abarca el estudio.

Esta prolongación del período de hibernación podría estar implicada en el descenso en los últimos veinte años del número de ejemplares de estas ardillas, al no contar con suficiente grasa para resistir tanto tiempo.

Normalmente, la mayoría de las alteraciones causadas por el cambio climático están relacionadas con un alza en las temperaturas, en cambio, en esta ocasión, se debe a las tormentas de nieve fuera de temporada.

El calendario de hibernación, en particular el día que termina, se considera de vital importancia para el bienestar de estos mamíferos, explicó Lane.

Los resultados del estudio demuestran que no sólo un aumento de temperaturas provoca una respuesta del organismo al cambio climático, según los investigadores.