EN mayo de 2005, el entonces diputado por Lota, Camilo Escalona, se trasladaba hasta Puerto Montt para anunciar su candidatura al Senado por la Región de Los Lagos. Lo acompañaban dirigentes locales y quien fungía de alcalde de la ciudad en su segundo período, Rabindranath Quinteros.

El espaldarazo del edil era fundamental para las aspiraciones parlamentarias del líder socialista. Este se selló en un almuerzo en la casa de Quinteros, quien es considerado un influyente caudillo local.

Escalona le consultó al dueño de casa si contaría con su colaboración en la campaña. "Por supuesto que te apoyo, si yo pertenezco a un partido", le respondió el jefe comunal.

Ocho años más tarde el panorama es radicalmente distinto. Tras un crítico proceso interno, con una directiva que a regañadientes se abrió a la realización de primarias convencionales en Los Lagos y la negativa de Escalona de someterse a ese mecanismo, Quinteros quedó como candidato único del PS en esa circunscripción, desplazando al actual senador. Esto, después de sortear las presiones de distintos dirigentes que le pedían postular a la Cámara Baja.

Aunque Quinteros es una figura política en Puerto Montt, su trayectoria comenzó lejos de esa ciudad. Luego de haberse criado en la localidad nortina de Taltal, donde su padre -uno de los fundadores del PS- fue regidor por la zona en distintos períodos, el ex alcalde se trasladó hasta Ovalle a cursar su educación secundaria.

Más tarde ingresó a estudiar Odontología en la Universidad de Chile y estableció sus primeros contactos con el PS. En 1963 comenzó a militar en ese partido y postuló a la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile en el cargo de delegado de su carrera. Al mismo tiempo, acompañó la candidatura a la presidencia de la Fech del dirigente de la escuela de Sociología, Ricardo Núñez. El enlace con una de las figuras de la renovación socialista se mantendría hasta el día de hoy.

En 1969, después de egresar, Quinteros se trasladó a Curicó a ejercer su profesión bajo el cargo de "dentista general de zona", donde atendió a liceanos de la ciudad hasta el 21 de septiembre de 1973, fecha en que fue detenido por el régimen militar.

Lo trasladaron hasta la cárcel de la ciudad y lo sometieron a un consejo de guerra. "Me acusaban de estar metido en el famoso Plan Z", recuerda. Fue condenado a cinco años de confinamiento a la localidad de San Pablo, comuna de Osorno, pena conmutada finalmente a tres años.

Bajo el régimen militar, Quinteros se encontró imposibilitado de trabajar en el servicio público. Por esto, se radicó en Osorno, donde instaló una consulta particular en calle Los Carrera e ingresó a la dirigencia de Deportes Provincial Osorno. Ambas actividades lo hicieron conocido en la zona.

Allí retomó su actividad política: participó de la fundación del PPD y se inscribió como candidato a diputado por Osorno bajo el alero del Partido Amplio de Izquierda Socialista (PAIS), uno de los grupos que después se integraría al PS a principios de los noventa. No obstante sus 11.782 votos, equivalentes a 15,03 por ciento, Quinteros fue superado por el DC Sergio Ojeda y la RN Marina Prochelle.

Pero los efectos de la derrota fueron acotados. Instaurada la democracia en 1990 el entonces Presidente Patricio Aylwin lo nombra intendente de la X Región. Desde esa plataforma, Quinteros adquirió notoriedad al participar de la modernización y auge económico de los años noventa. "Rabindranath se hace muy conocido por esos años con las obras públicas. Por ejemplo, le tocó hacerse cargo de la electrificación de buena parte de la Isla de Chiloé", señaló un parlamentario de la zona.

Fue ratificado en la intendencia por Eduardo Frei Ruiz-Tagle. Y ya en el 2000, Quinteros se postuló como alcalde de Puerto Montt, cargo en el que se mantuvo por tres períodos consecutivos con altos índices de votación y que consolidó su carrera de caudillo.

"Rabindranath es un tipo transversal. Si bien es socialista, tiene buenas relaciones con el resto de los partidos de la Concertación, la derecha y los empresarios de la zona. Y tiene un estilo cercano para tratar con la gente", sostuvo el ex senador DC Sergio Páez, figura con quien forjó una cercana relación mientras Quinteros fue intendente.

De hecho, en la elección senatorial anterior, tras entregarle su apoyo a Escalona, Quinteros viajó fuera del país. En esos días apareció en Puerto Montt un monumental con la imagen de Páez, quien postulaba a su tercer período como senador, junto al entonces alcalde, lo que fue recibido como un golpe por el ex presidente de la Cámara Alta.

Quienes lo conocen dicen también que tiene un liderazgo personalista y poco inclusivo. Una de las críticas que se le hace es que no se ha preocupado de promover un sucesor y ese fue uno de los problemas que enfrentó el PS en las últimas elecciones municipales. El actual edil de Puerto Montt, Gervoy Paredes, es un cercano a Escalona.

Lo que también resienten en el PS es que nunca se ha involucrado demasiado en la vida partidaria. No responde a ninguna de las tendencias internas de su colectividad, pese a reconocer cercanía con la "Renovación" de Ricardo Núñez, pero más por un asunto afectivo. "Una amistad de más de 40 años", resumió Quinteros. "Su participación se limita principalmente a votar en las elecciones internas", agregó un personero socialista.

Aunque ya era difícil desbancar -internamente- a una de las figuras más importantes del PS como Camilo Escalona, su escasa vinculación con su partido -dicen en la región- complicó todavía más que la tienda aprobara su candidatura senatorial.

Pero Quinteros se encontró con un aliado: el diputado Fidel Espinoza. Si bien el parlamentario había sido uno de los principales promotores de la postulación de Escalona en 2005, ahora estaba en la fila de sus rivales, ya que también pretendía llegar al Senado. Al abandonar sus aspiraciones, se alineó con el ex alcalde. De hecho, el jueves en la noche ambos hacían campaña en la localidad de Quemchi con la candidata a diputada Jenny Alvarez, quien también era una adversaria de Quinteros.