Mañana viernes 15 de mayo, el metro de la capital rusa, Moscú, cumplirá 80 años desde que fue inaugurado.

El tren bajo tierra -que además es conocido como el Palacio subterráneo- fue construído en 1935 como un espacio lleno de lujos para los trabajadores, el cual incluía incrustaciones de mosaicos, lámparas de araña, mármol y estatuas.

El metro tiene 196 estaciones, 12 líneas y una longitud de tendido de 327 kilómetros, posicionándose así como el tercero más largo del mundo, después del de Londres y Nueva York.