La presión es alta: transferir los números de la serie Glee al descuelgue solista de su estrella principal, Lea Michele. En cinco ciclos, la producción sobre un grupo de estudiantes y sus relaciones en torno a un club de canto despachó 15 discos de bandas sonoras, vendiendo más de 13 millones de copias. La serie, sin embargo, ya anunció su final; a tiempo que su protagonista prepara su relevo con un debut atravesado por complicaciones.
Michele está trabajando en él desde la primavera de 2012. Esta semana presentó el segundo adelanto de Louder, el trabajo que publicará el 4 de marzo. La pista homónima tiene un envoltorio dance, abrazando el electropop de moda entre divas como Britney Spears, aunque su voz bien arriba en la mezcla. "Finalmente el disco se siente como algo real", comentó a Billboard. Eso porque el álbum estaba listo en junio, esperando una fecha de publicación.
Un mes después de terminar su álbum, el actor Corey Monteith -entonces pareja de Michele y parte del elenco de Glee- murió de sobredosis. Y el momento no era el adecuado para que lo lanzara. El álbum, de hecho, sumó canciones en homenaje a su compañero: If you say so y Cannonball para completar 11 temas.
Ya en septiembre llegó una quinta temporada de Glee y publicó su tributo a The Beatles (Glee sings the Beatles) y en octubre, el EP The Quarterback, con el homenaje que rindió en pantalla a Monteith. Michele, de 27 años, vio una vez más aplazado su ingreso a las grandes ligas del pop, un sueño que según ha contado en entrevistas, amasa desde sus adolescencia actuando en Broadway.
El primer single, Cannonball, debutó algo tímido el 12 de diciembre. Pero mejor suerte tuvo su video, que desde el 9 de enero, suma tres millones de visitas.