El disidente cubano Oscar Elías Biscet fue puesto en libertad tras 11 años de prisión.

Fue detenido junto a otros 75 disidentes en la primavera del 2003, pero en su caso acababa de ser liberado de otra condena, apenas un mes y medio antes.

Biscet enfrentó cargos de trabajar con Estados Unidos en actividades subversivas contra el gobierno cubano.

Médico de profesión e intensamente religioso, inició sus actividades opositoras en 1997, al frente de la Fundación Lawton, organización disidente con un perfil de defensa de los Derechos Humanos y antiabortista.

Se destacó entre todos los líderes opositores por su activismo en las calles, huelgas de hambre, protestas en las puertas de los hospitales donde practican abortos y manifestaciones públicas antigubernamentales.

Es uno de los disidentes que optó por permanecer en Cuba, una decisión que solo tomaron una decena del centenar de prisioneros liberados gracias a los acuerdos entre el gobierno y la Iglesia Católica. El resto viajaron a España y a los Estados Unidos.

POR LOS DD.HH. Y CONTRA EL ABORTO

"Cuando creamos la Fundación Lawton nos consagramos a luchar por la libertad y por la vida de los nonatos, o sea del niño no nacido. Nos oponemos al aborto, a la pena de muerte, a la eutanasia y al suicidio", explicó Biscet a BBC Mundo.

Agregó que "antes que ser político o activista de los DD.HH. soy un hombre muy amoroso de Dios y me dedico profundamente al estudio bíblico. No pertenezco a ninguna iglesia pero participo en la de mi esposa, la Iglesia Bautista".

Asegura que no quiso viajar a España porque "desde que creé la Fundación Lawton tomé el compromiso conmigo mismo de no partir del país. Creo que mientras en Cuba no exista libertad todos debemos estar aquí para luchar por ella".


ESTE AÑO SEREMOS LIBRES

Apenas unas horas después de abandonar la prisión, Oscar Biscet ratificó su apuesta política anterior, "para conquistar la libertad, si el gobierno no cede, el pueblo debe hacer la acción directa, que es no violenta pero es en las calles".

El opositor se muestra verdaderamente optimista sobre el futuro de la disidencia. "Hay mucho descontento, nosotros estamos convencidos de que este año seremos libres porque el pueblo está con nosotros, solamente hay que unirlo".

Afirma que la oposición es valiente y la unidad con el pueblo no se ha producido porque "aquí hay una dictadura totalitaria, además tiene que haber un líder carismático o una agrupación carismática que una a todas esas personas".

Biscet cree que hay una visión "muy positiva de los que hemos salido de prisión, se trata de la vanguardia de la oposición, pasamos muchos años presos con una dignidad muy alta y no cedimos a las peticiones del gobierno de abandonar la patria".

UN ACTIVISTA POLITICO

El proyecto de Biscet es crear una dirección opositora unificada con los excarcelados que se quedaron en Cuba y sumando a "otros líderes importantes se puede hacer una coalición amplia" para luchar por un cambio que "con el favor de Dios será a corto plazo".

Considera que las reformas impulsadas por Raúl Castro son solo cosméticas y asegura que "el gobierno está desesperado por una crisis que se va a profundizar más que la de la década del 90. Es lo que explica estas aperturas en ciertas libertades".

"Por eso nos liberan a nosotros para presentarse como un gobierno que busca un cambio pero sabemos que en otras ocasiones ya han liberado presos políticos y al año vuelven a detener opositores", agregó Oscar Elías Biscet.

Con la liberación de este médico el gobierno cubano enfrenta un reto político. Se trata de un activista que no solo rechazó abandonar el país sino que parece dispuesto a continuar con la política de movilizaciones callejeras que lo llevó a prisión durante 11 años.