por Ramiro Fuenzalida, enviado especial a Antalya
Si por algo apostaban todos en la delegación de Chile era por permanecer en Antalya, donde ya estaban acostumbrados, como aseguraron Mario Salas y el resto del plantel.
Sin embargo, la apuesta final ante Irak no resultó, más allá de que el equipo tuvo pasajes de buen funcionamiento, pero claramente quedó en deuda un mejor juego colectivo e individual que alimentara, en cancha, la certeza de que el equipo chileno podía quedarse con el grupo, situación que finalmente no se concretó.
Esto último, justamente, implicó una serie de problemas logísticos para el equipo, pues a primera hora de hoy debían, en teoría, abandonar el hotel de concentración de Antalya.
"Sabemos que Inglaterra y Egipto tienen vuelo mañana (hoy) a las 7.30 para dejar la concentración de Antalya. Nosotros también deberíamos viajar a esa hora rumbo a Estambul y de ahí a Bursa, pero estamos viendo la forma de solucionar un tema en ese punto", confesaron en la delegación, luego de consumada la despedida de la sede.
Y es que la organización tiene contemplado el traslado de la selección chilena desde Estambul a Bursa en un ferry, en un viaje de más de tres horas, situación que trastoca todos los planes, pensando, principalmente, en el desgaste del mencionado viaje, más si se considera que, tras jugar de noche, deberán levantarse muy temprano para emprender un largo recorrido.
Por lo mismo, enterados de esta situación y aconsejados por la delegación uruguaya, es que la delegación nacional gestionaba poder volar a Bursa en un chárter, algo que quedó de ser respondido hoy a primera hora.
"A Uruguay lo iban a llevar en ferry hasta Estambul desde Antalya, pero exigieron un avión y lo consiguieron, porque el tema no es menor, pensando en el desgaste", adelantaron en Chile.
Sorpresa dirigencial
Parte de la dirigencia nacional presenció ayer el partido ante Irak y se sorprendió por los seis cambios que presentó Salas en el equipo, en un partido donde se jugaba la punta del grupo.
De hecho, uno de los directivos presentes comentó que "no se entiende. Si no quieren moverse de Antalya, para qué presenta un equipo alternativo. Es dar ventajas".
"Acá se corrió un riesgo y no dio resultado. Se trastocan todos los planes, incluso el itinerario, porque habrá que madrugar para viajar, lo que implica un desgaste", agregó el dirigente nacional.
En el plantel, sin embargo, se tomaron de mejor ánimo la situación. "Estamos preparados para viajar. El cansancio debemos absorberlo y recuperarnos bien. Era ideal quedarse en Antalya para no desgastarse, pero ya está", dijo el volante Sebastián Martínez, quien ayer fue el capitán de la "Roja".