"Jugué mal (ante Barnechea)", dice. "¿Tan categórico?", le preguntan. "Sí, no hay otra vuelta. No estoy (físicamente) como me gustaría", agrega. Gustavo Canales está lejos del nivel que le valió ganarse todos los aplausos en el arranque demoledor de Universidad de Chile en el Apertura.

El rostro del atacante es el mejor termómetro del complicado presente azul. La tranquilidad y las risas de las últimas semanas quedaron atrás, luego que Colo Colo los alcanzara en la cima del certamen local.

El gran enemigo del "19" ha sido una rebelde esguince grado 1 en el tobillo derecho. El nacionalizado chileno, en la antesala al duelo ante el Cacique (11ª fecha), sufrió un duro golpe en la práctica, cuyas repercusiones aún lo persiguen.

Sus números en los últimos partidos son preocupantes. El oriundo de General Roca no celebra desde la 9ª fecha del torneo. La última vez que convirtió fue en la victoria 3-2 de la U sobre Audax Italiano, el pasado 27 de septiembre. Es decir, hace 60 días. Después, por sus molestias, sólo ha participado en cuatro encuentros.

"Soy exigente conmigo mismo y sé que mis compañeros esperan cosas de mí. En la medida que me entrene y me ponga a la altura del resto, estaré más cerca de rendirle no sólo al cuerpo técnico y a mis compañeros, sino a  mí mismo y a toda la gente de la 'U', que espera ese plus que creo tener. Estoy muy tranquilo, sé reconocer cuando no juego bien", revelaba el Mágico, el martes en el CDA.

En el cuerpo médico azul no están ajenos a la complicada situación del atacante. Entrenamientos diferenciados y sesiones de reforzamiento de gimnasio en la zona muscular afectada han marcado su pauta de ejercicios durante las últimas semanas. "Canales está en perfectas condiciones. Está totalmente recuperado y entrena con normalidad", dice Fernando Radice, médico de la U.

La lesión del atacante, pese a no ser de gran complejidad, no le ha permitido volver a ser el jugador que destacó en las primeras fechas.

"He estado con algunos problemas que me limitaron para trabajar a la par de mis compañeros y lo he sentido, pero a esta hora ya no valen las excusas. Si el DT me puso desde el arranque (ante Barnechea) es porque que estaba en condiciones de ayudar a mis compañeros, cosa que no hice como a mí me gusta, por eso me quedé con tristeza", confesó Canales.

La explicación de Radice a las constantes molestias del atacante, se avala en que el jugador siente dolor al realizar diferentes tipos de movimientos.

"En alto rendimiento sentir alguna molestia puntual en ciertos movimientos o gestos técnicos pueden afectar su nivel y a la sensibilidad del jugador. El no tiene molestias para actividades diarias", asegura.

Por su parte, Marcelo Rodríguez, agente de Canales, añade que su representado está muy cómodo en la U, pero adelantó que su futuro se analizará al final de presente temporada: "Gustavo está muy feliz en la U. No hemos recibido ninguna oferta y su idea es seguir. Sólo algo muy bueno económicamente podría gatillar su salida del club, pero es difícil".