Los aires patrióticos del Bicentenario llegan a la mesa una vez más. Esta vez, apostando a una ubicación donde el criollismo suena bien poco: Avenida Italia y sus alrededores, habitualmente dados a una cocina internacional (De Cangrejo a Conejo) o de autor (Sukalde), a modo de ejemplo de comedores conspicuos. Desde ese punto de vista, El Encanto Chileno aporta diversidad dentro del barrio. Un plus reforzado por un ambiente visualmente austero, iluminado, de buenos espacios llenados de música folclórica a volumen tenue; el sitio óptimo para dar rienda suelta a cualquier tipicidad culinaria, aunque aún tenga piezas por ajustar.
Para el picoteo, el suave cuero de pata de chancho ($ 4.500) rellena de una suerte de paté de carne del animal, llamó la atención por lo estilizado de la propuesta, habitualmente presentada en daditos gelatinosos. Aprobado por su rico interior. Por otro lado, en la porción de empanadas de mariscos ($ 2.900) resaltó su impecable fritura e interior fresco. Gusto a poco no más.
La lista de platos es larga, con algunas salidas de libreto respecto al panteón culinario nacional, pero nada como para rasgar vestiduras. Se quiso ir por un gran éxito sureño, como es el cancato de salmón ($ 6.000) pero ante su ausencia, la curiosidad se volcó hacia la zona de carnes. Ahí, la cazuela ($ 3.900) preparada con un trozo generoso de asado de tira, aportó un sabor que demostró su valía como corte preferido para esa receta. Los dos medallones de carne mechada ($ 4.500) llegaron a la temperatura correcta, ofrecieron grata consistencia y juguito impregnado de su relleno vegetal. Acompañado de impecables papas salteadas ($ 1.600), es candidato a figura. Todo lo contrario de una porción de lengua nogada ($ 3.100) de salseo agradable, aunque de dureza emparentada con el charqui, que con un puré picante ($ 1.300) demasiado tenue necesita mucho trabajo para repuntar.
El sitio apenas despunta de su marcha blanca. Por eso de manera perentoria requiere ajustar sus piezas en términos de servicio. Poco prolijo en la postura de platos y cuchillería, ignorante de la naturaleza de los platos y sus ingredientes, como también del correcto servicio del vino (un Cousiño Macul Antiguas Reservas ($ 11.000), Cabernet Sauvignon de primera). En resumen, chicas de buena voluntad, pero con la cabeza en otra parte. Por favor, además, una vuelta de tuerca también a los postres: más consistencia y vigor dulce en la leche nevada ($ 1.500) y todo lo contrario en la torta tres leches ($ 1.800), demasiado compacta para que reluzca su bizcocho, aunque rica de todos modos. Si bien es cierto aún no alza vuelo al 100% y todavía no es el sugestivo rincón criollo que pretende ser, El Encanto Chileno luce varios platos con la dignidad del recién llegado. Por precio, ubicación y onda, merece una vuelta de prueba.
FICHA
Dirección: Bilbao 468, Providencia.
Teléfono: 6659554
Horario: Lunes a sábado almuerzo y cena. Domingo, almuerzo.
Consumo promedio: $ 12.000
Calificación: 5
