Eso sí, no porque quiera ocultar los millones que suma su fortuna. Al contrario. El príncipe y su oficina han cortado relaciones con Forbes porque consideran que la famosa revista de negocios no le ha puesto suficientes ceros a su patrimonio.
En su lista de las personas más ricas del mundo 2013, Forbes ubicó al príncipe en el puesto número 26, con US$20.000 millones.
De acuerdo a otros reportes, la fortuna estimada del príncipe sería algo mayor: unos US$9.600 millones, lo que lo catapultaría entre los 10 hombres más ricos del mundo.
Forbes dijo que ha examinado "profundamente" la fortuna del príncipe, a partir de acusaciones de que éste estaría exagerando su fortuna.
A través de un artículo publicado en su página web, Forbes aseguró que a menudo el príncipe hace todo lo posible para alterar su ranking y que no es primera vez que no queda conforme y se queja.
"De los 1.426 multimillonarios de nuestra lista, ninguno –ni siquiera el vanaglorioso Donald Trump- han tomado medidas para alterar sus rankings", aseguró la revista.
Algunos de sus socios le habrían asegurado a la revista que la lista era muy importante para el príncipe.
"Es la manera en que él quiere que el mundo juzgue su éxito o estatura", aseguró una fuente anónima citada por la revista.
La lista, publicada el lunes, mantuvo al mexicano Carlos Slim como el hombre más rico del mundo, con una fortuna avaluada en US$ 73.000 millones.
Problemas metodológicos
La oficina del príncipe Bin Talal reclama que la revista utilizó métodos de evaluación defectuosos que están "diseñados para poner en desventaja" a los inversionistas de Medio Oriente.
Aseguró también que la revista se ha negado a aceptar las valuaciones de las acciones que cotizan en Tadawul, la Bolsa de Valores de Arabia Saudita, al tiempo que había aceptado las valoraciones de los listados en otros mercados emergentes, como la Bolsa Mexicana de Valores.
Según la oficina de Alwaleed, Forbes había aplicado "diferentes estándares de prueba para diferentes personas", por lo que aseguraron que le han pedido a Forbes eliminar al príncipe de su lista de ricos.
Añadió que había cortado todos los lazos con la revista y ya no cooperan con los equipos de valoración.
"Hemos trabajado muy abiertamente con el equipo de Forbes lo largo de los años y les hemos hecho ver en múltiples ocasiones que tienen problemas con la metodología que hay que corregir", dijo en un comunicado Shadi Sanbar, director financiero del Kingdom Holding Company.
"Sin embargo, después de varios años de esfuerzos para corregir los errores de oídos sordos, hemos decidido que Forbes no tiene la intención de mejorar la exactitud de la valoración de nuestros holdings y hemos tomado la decisión de seguir adelante".
Kingdom Holding Company, cuyas acciones se cotizan en la bolsa de valores saudita, posee participaciones en grupos hoteleros como Four Seasons y Fairmont Raffles y es uno de los propietarios del Hotel Savoy de Londres.
El príncipe es un importante inversor en News Corporation y, según Forbes, compró una participación del 3% en Twitter el año pasado por US$300 millones.