Internado en la unidad siquiátrica del Hospital Clínico Lautaro Navarro de Punta Arenas, se encuentra José Alacruz Prado (28), el gendarme que ayer se parapetó con dos armas en una garita del recinto penitenciario de dicha ciudad durante cuatro horas, debido a una profunda depresión.

El funcionario lanzó 25 disparos al aire, demandando mejoras en las condiciones y jornadas laborales, ya que desde 2005 se desempeñaba como vigilante con "extenuantes turnos", según lo indicó el presidente de la Asociación Nacional de Funcionarios Penitenciarios, Pedro Hernández.

"Las motivaciones (para parapetarse) son el desgaste propio que sufre la persona por el ritmo de trabajo que se lleva, por las jornadas extensas, los turnos extenuantes que cumplen los funcionarios que hacen la labor de vigilancia arriba en las torres", sentenció.

Según Hernández, "él es un funcionario que ya llevaba seis años trabajando en estos turnos de vigilancia en las torres en Punta Arenas, torres que no tienen calefacción, torres que no tienen ni siquiera un urinario, donde hay que cumplir los turnos las 24 horas del día".

Por su parte, el director regional de Gendarmería y seremi de Justicia Subrogante, Coronel Carlos Cortés, señaló que la demanda laboral del gendarme tiene relación con la baja dotación de funcionarios, "situación que ha obligado a Alcarruz a mantenerse en su puesto de centinela en una de las torres de vigilancia del sector", dijo.

Alacruz Prado cumplía con un régimen laboral de cinco días de trabajo y uno de descanso de forma continua, tal como lo explicó el presidente de la Asociación Nacional de Funcionarios Penitenciarios. "Este funcionario tenía que estar cinco días laborando para que le pudieran dar un día de descanso y los cinco días de trabajo son de trabajo, él solamente duerme cuatro horas por noche (...) en algunas unidades penales estos turnos llegan a ser de hasta 14 días por escasez de personal", precisó.

Gendarmería realizará un sumario interno para investigar las causas que provocaron este incidente. En tanto, Hernández hizo un llamado a la autoridad a que "ponga todos los equipos de salud que contamos hoy día, a disposición de este funcionario para recuperarlo sicológicamente", ya que "no ingresó al servicio enfermo", dijo. "Que no sea esta una causal para que se le vaya a destituir, porque eso sí que sería aberrante", enfatizó.

ALTA TASA DE SUICIDIOS
Pedro Hernández manifestó que Gendarmería presenta altos índices de suicidio e intentos de suicidio en relación a otras instituciones públicas.

"Somos el servicio público que contamos con más suicidios en la jornada de trabajo, que ninguna otra institución en la administración pública", sostuvo.

Desde el año 2009 a la fecha, se han registrado 10 suicidios y 40 intentos de suicidio al interior de la institución, según lo indicó el presidente de la Asociación Nacional de Funcionarios Penitenciarios.

A juicio del dirigente, este hecho se debe a que "no tenemos políticas de salud mental, no tenemos profesionales que nos evalúen" periódicamente.

"Para el personal de Gendarmería de Chile, existen tres siquiatras en el país y dos sicólogos en todo el país para los casi 12 mil gendarmes que somos", expresó Hernández.