Wellington, la capital de Nueva Zelandia, no es la ciudad más grande de la patria del kiwi. Por el contrario, tiene apenas 400 mil habitantes y cualquier hecho que reúna a más de 500 personas es un pequeño evento local. El de este martes, sin embargo, no fue pequeño. Fue uno magno, de proporciones inhabituales: se concentraron cerca de 100 mil personas para el estreno de la película El hobbit: un viaje inesperado, primera parte de la trilogía de Peter Jackson basada en el libro homónimo de J. R. R. Tolkien. Es decir, se reunió un cuarto de la población de la ciudad.

La avant premiere de la cinta se desarrolló con el director Peter Jackson y gran parte de los actores (sólo faltó Ian McKellen, que es Gandalf) en el Embassy Theater, monumento nacional del país, con 98 años de antigüedad. Los 100 mil seguidores se dispersaron en distintos lugares de la capital neozelandesa, entre el aeropuerto, el Embassy Theater y el Museum Te Papa, el más importante del país y donde el equipo de la película ofreció una conferencia antes de la premiere. Casi una década antes, el 1 de diciembre del 2003, Wellington también había sido la urbe escogida para estrenar El señor de los anillos: El retorno del rey, la última parte de la trilogía basada en la obra de Tolkien. Es la ciudad donde vive y trabaja Peter Jackson, aquella donde tiene sus estudios de Weta Workshop y Weta Digital. Es también el lugar que el martes, en medio de la algarabía general, fue testigo de la protesta de miembros de la agrupación animalista PETA por el supuesto maltrato a más de 20 animales, entre caballos y ovejas, en la producción del filme. "Lo niego terminantemente. Esta manifestación es bastante patética", dijo Jackson sobre este tópico.

El hobbit: un viaje inesperado aplica por primera vez la tecnología de los 48 cuadros por segundo, que permite una definición superior a la estándar. En Chile, el filme se estrena con cerca de 140 copias el 13 de diciembre, entre las que habrá normales, en 3D y en 3D a 48 cuadros por segundo. Las primeras reacciones a la cinta se concentraron en este aspecto, el único abordable en las reseñas periodísticas, considerando que los responsables de El hobbit impusieron un embargo de reseñas en la prensa hasta el día del estreno mundial, entre el 13 y 14 de diciembre.

Uno de los entusiastas fue el director Bryan Singer (X-men, Los sospechosos de siempre), invitado a la premiere, quien tuiteó: "La película tiene un envidiable nivel en la definición de imagen. Además es increíble y atrapante. ¡La amé!". También hubo asistencia de políticos locales (el ministro de Transportes Steven Joyce escribió en su cuenta: "Una película maestra") y del propio primer ministro de Nueva Zelandia, John Key, que trató de "genio" a Peter Jackson.

En principio pensada para dos partes, la nueva saga de Jackson fue subdividida a último momento en tres. La segunda parte se estrena en diciembre del próximo año, y la tercera, a mediados del 2014. Su historia es la del hobbit Bilbo Bolsón (Martin Freeman), quien es impulsado por el mago Gandalf (Sir Ian McKellen) a ayudar a un grupo de 13 enanos a recuperar su reino perdido de Erebor. Ahí le espera un encuentro con el dragón Smaug, pero antes se verá las caras con Gollum, el famoso hobbit deforme que luego reaparece en El señor de los anillos.

El arribo de El hobbit se produce justo cuando los herederos de Tolkien demandaron a los estudios Warner por 80 millones de dólares, reclamando derechos sobre licencias de productos digitales y videojuegos.