Pese al rechazo que genera en un sector de la Democracia Cristiana la idea de sellar una alianza política con el PC, este lunes 6 de enero los partidos de la Nueva Mayoría iniciarán formalmente la discusión para institucionalizar dicho conglomerado y, de paso, emitir el certificado de defunción de la Concertación de Partidos por la Democracia.

A la cita del lunes fueron convocados todos los presidentes de partidos, incluido el timonel comunista, diputado Guillermo Teillier, con el fin de retomar las reuniones formales de coordinación del conglomerado y discutir la agenda legislativa de enero.  Durante el encuentro, señaló el presidente del PS, Osvaldo Andrade, se pretende establecer el mecanismo de rotación de las vocerías de la nueva coalición, lo que dará pie a la discusión respecto del carácter institucional que tendrá la Nueva Mayoría. "Es muy probable que allí surjan voces que apunten a  la institucionalización", dijo Andrade.

"El acuerdo de los presidentes es discutir el tema de Nueva Mayoría, qué es y cómo va a  operar, y a nosotros nos interesa que exista ese espacio de coordinación", aseguró el secretario general del PPD, Gonzalo Navarrete.

Pero el tema no se agotará en la reunión de la Nueva Mayoría del lunes por la mañana, ya que la mayoría de los partidos llegará a la cita sin una resolución definitiva sobre la nueva alianza política.

El PPD tiene contemplado entrar de lleno a la discusión en una reunión conjunta de la mesa directiva y la comisión política convocada para ese mismo lunes en la tarde. Los socialistas, en tanto, abordarán el asunto en la comisión política de la semana entrante y en el comité central del 11 de enero. "Inevitablemente se transformará en una coalición política, porque tiene programa común, resultados electorales comunes, presidenta común y sus partidos será parte del mismo gobierno", precisó Andrade.

Salvo la DC, la mayoría de los partidos opositores está por proyectar a la Nueva Mayoría como el referente que supere a la Concertación. De hecho, en las encuestas previas a las elecciones del año pasado, la Nueva Mayoría tenía al menos 10 puntos más de apoyo ciudadano que la Concertación (32% versus 21%, Adimark de diciembre).

"Esta nueva mayoría necesita música y letra para lo que viene, y debe  parecerse más a una coalición que a otra cosa", dijo el presidente del PPD, Jaime Quintana, quien espera llegar a la reunión del 6 de enero con algunas propuestas sobre el tema, previa conversación con algunos dirigentes.

LA NEGATIVA DC

El principal problema para institucionalizar la Nueva Mayoría proviene de la DC, partido en el cual hay dirigentes que se niegan a participar de una coalición política con el PC.

El presidente de la DC, senador Ignacio Walker, encabeza esa postura y explica la participación de su partido junto al PC en la Nueva Mayoría en el marco de un acuerdo electoral y no político.

"Con el PC es imposible hacer una coalición política, estratégica de mediano y largo plazo", afirmó Walker, quien insistió en que una coalición política, además, se debe dar entre fuerzas afines y convergentes.

En la disidencia DC discrepan de la postura asumida por Walker. "La Nueva Mayoría es una alianza política y lo demás es una distinción académica que no tiene asidero", afirmó a La Tercera el diputado Aldo Cornejo.

El tema no ha sido tratado formalmente en la mesa directiva de la DC, pero sus integrantes no descartan que después de la reunión del lunes, sea parte de la discusión. "La única forma de entrar al debate es rediscutiendo la política de alianzas del partido y en eso no hay apuro", confidenció  Walker.

En la falange explican que la negativa de Walker obedece más a los problemas que le ocasiona con la DC alemana (que apoya económicamente a su par chilena), que a una definición política de fondo.b