En sus pinceladas finales se encuentra la reforma al sistema binominal que busca dar un nuevo rostro al Congreso. La iniciativa que modifica la Ley Orgánica de Votaciones y Escrutinios, para configurar un nuevo mapa electoral, es complementaria a la reforma constitucional que permitiría aumentar parlamentarios y que debe ser votada ahora por la Cámara.

Pero el nuevo mapa recién sería detallado en el segundo proyecto que será ingresado antes de fin de año. La propuesta aumenta a 44 los senadores y a 134 los diputados. También propone fusionar algunas zonas electorales. Así las circunscripciones senatoriales pasarían de 19 a 16 y los distritos se reducirían de 60 a 30. Este punto fue uno de los últimos ajustes -originalmente eran 31 distritos- que hicieron los equipos técnicos de RN y la oposición. En estas tratativas ha participado el experto electoral Tomás Duval en representación de RN y, a nombre de la DC, el académico Mauricio Morales.

La reforma plantea, además, aumentar en dos los candidatos. Hoy pueden postular sólo dos personas por pacto en cada lugar. Así, por ejemplo, en las zonas que elijan dos legisladores, cada lista podría presentar cuatro candidatos; donde se elijan cuatro representantes, podrían postularse seis personas; y en las zonas que elijan seis, cada pacto podría llevar ocho candidatos.

LAS POSTURAS

SI: ¿Por qué cambiar el sistema electoral con este proyecto?

La propuesta electoral surgió de un acuerdo de RN y la DC, a la que se sumaron legisladores de otros partidos opositores. Quienes defienden la fórmula propuesta argumentan que hoy el Congreso está empatado, la mayoría no está debidamente representada y algunas minorías que tienen menos de un 33% de apoyo no tienen fuerza para ingresar por sí solas al Parlamento. Además, plantean que corrige la subrepresentación que hoy tiene Santiago, Valparaíso y Concepción, que a pesar de su población, tienen pocos parlamentarios.

Si bien la propuesta no es la "ideal" a ojos de la oposición, sus defensores dicen que es un avance.

En RN y en la DC, en tanto, sostienen que es, además, una forma de neutralizar y responder institucionalmente al ímpetu de una asamblea constituyente.

NO: ¿Por qué la propuesta no convence?

La propuesta implicará un aumento de senadores y diputados, que a juicio de  la UDI y un grupo disidente de oposición y RN no se justifica. Cada parlamentario se traduce en un mayor gasto para el Fisco, lo que sería impopular y no mejoraría la imagen del Congreso.

Según dirigentes oficialistas, además, sostienen que la fusión de distritos y circunscripciones encarecerá las campañas políticas.

Creen que la fusión y el aumento de legisladores en Santiago, por ejemplo, perjudicará los intereses de  zonas rurales o regiones menos pobladas, ya que los parlamentarios tenderán a beneficiar a las grandes urbes, donde se concentra la mayor cantidad de votos.

En la otra vereda, un sector de la oposición dice que la reforma es un "maquillaje", que no cambia el fondo del sistema binominal.