Una semana resta para el inicio de la Premier league, y hay un par de jugadores que aún no puede determinar cuál será su futuro por el resto de la temporada.

Esto porque si bien se sabe del deseo de Wayne Rooney y Luis Suárez de abandonar sus actuales clubes e ir por nuevos desafíos, los directivos no han hecho las cosas más fáciles para allanar sus partidas.

El Chelsea y el Arsenal serían los dos equipos más interesados en fichar al "Jabalí" y al uruguayo, respectivamente, pero según informa el Daily Mail esto simplemente no sucederá. 

Según el portal inglés, John W Henry, principal dueño del Liverpool, y la familia Glazers, propietarios de los "diablos rojos" habrían acordado no dar su brazo a torcer por los delanteros, con el objetivo de no reforzar a dos de sus rivales directos. 

De esta manera, la única manera que "Luisito" parta es que la oferta que llegue provenga desde el extranjero y por un precio no menor a los 80 millones de euros. Por su parte, los de Manchester solo dejarían partir a Rooney a clubes de alto poderío económico, como el PSG o el Monaco, siempre y cuando se pongan sobre la mesa al menos 60 millones de la moneda europea.

"Siendo realistas, ninguna de las dos situaciones se va a dar", analiza tajante el medio británico.

Bale, aún sin desenlace

Otro que tampoco ha podido resolver su situación es Gareth Bale, pretendido por el Real Madrid, pero firmemente retenido por su actual club, el Tottenham.

Esta vez, en un amistoso ante el Espanyol, el galés ni siquiera se apareció por el estadio para ver la igualdad a uno que consiguieron sus compañeros. 

Argumentando una supuesta lesión, el técnico Villas Boas se refirió a la ausencia del polifuncional jugador. "Hace tres semanas que jugó por última vez, así que no sé cuándo estará disponible", señaló resignado.

De todas formas, las negociaciones por Bale seguirían en curso, y solo bastaría por definir la forma de pago de una suma de euros que estaría cerca de los 120 millones.