El senador Jovino Novoa fue uno de los primeros dirigentes en llegar ayer a la comisión política de la UDI. Eran momentos de tensión, pues pocos minutos antes el ex candidato Andrés Allamand había señalado que el sector debía llegar a noviembre con una carta de consenso, afirmando que él no iba a llegar a competir en noviembre si no era mediante un acuerdo. Todo el peso político de no aparecer generando divisiones en la coalición quedaba entonces en manos del gremialismo, como apostaba RN.
Novoa, sin embargo, fue el primero que le respondió a Allamand. "RN lo que puede hacer es plantear cuál es su candidato. Las condiciones en las que se nombra un candidato no las ponen ellos", señaló el senador por Santiago Poniente, quien luego cuestionó al ex abanderado de RN y dijo en forma tajante que "la UDI va a elegir a su candidato".
Cuando Pablo Longueira debió abandonar su postulación presidencial, el miércoles pasado, Novoa fue uno de los primeros en hablar con la hoy abanderada. La conversación fue en el Congreso, en Valparaíso, antes que el Presidente Sebastián Piñera contactara a la actual abanderada por teléfono.
A esa altura, tal como ocurrió con la crisis tras el crimen de Jaime Guzmán en 1991, Novoa ya había asumido buena parte del peso de las decisiones al interior del gremialismo y retomado su rol de hombre fuerte en la tienda de calle Suecia. Ya en abril, cuando Longueira reemplazó a Laurence Golborne en el cuadro presidencial, el senador se había jugado por ordenar a la tienda detrás de la idea de enfrentar a Andrés Allamand en primarias.